SANTA CRUZ DE TENERIFE 27 Ene. (EUROPA PRESS) -
Las Asociaciones de Empresarios del Comercio del Libro de ambas provincias solicitaron ayer a la Consejería de Educación, Universidades, Cultura y Deportes del Gobierno de Canarias la renovación del convenio que ha permitido el curso actual el desarrollo del programa de implantación de la tarjeta electrónica para la adquisición gratuita de libros de texto, según ha informado la Consejería en un comunicado.
Esta es la primera experiencia en el Estado de utilización de un sistema electrónico para la compra de libros de texto, cuyo uso por el alumno continuará funcionando como un sistema de préstamo.
La petición la realizaron los libreros en el transcurso de una reunión a la que asistieron por parte de la Consejería de Educación, su titular, Milagros Luis Brito; el viceconsejero de Educación y Universidades, Gonzalo Marrero Rodríguez; y la directora general de Promoción Educativa, Pilar Teresa Díaz Luis; así como el director general de Comercio de la Consejería de Empleo, Industria y Comercio, Arturo Cabrera González.
Los empresarios valoraron muy positivamente el sistema implantado pues ha ayudado a la supervivencia de las pequeñas y medianas librerías y el mantenimiento de los puestos de trabajos de sus empleados en una época de crisis económica. Además el asociacionismo del colectivo se ha visto también muy beneficiado.
Otro aspecto que destacaron las Asociaciones de Empresarios del Comercio del Libro fueron la transparencia de la gestión y la posibilidad que se les brinda a los padres de poder adquirir libros de texto y material escolar en cualquier comercio asociado.
El nuevo convenio a firmar, que introducirá mejoras emanadas de su puesta en práctica el curso actual, irá acompañada del compromiso de la Consejería de realizar una campaña informativa en los centros sobre el uso de la tarjeta.
El sistema de uso de libros de texto, además de ser un paso más en la gratuidad de la enseñanza básica para el alumnado canario, es un medio para el proceso de aprendizaje de los niños y niñas al fomentar la corresponsabilidad social e institucional de la propiedad compartida.
La tarjeta se entrega a cada familia en el propio centro en el que se encuentra matriculado el alumno y los libros de texto adquiridos son propiedad de la Consejería de Educación, Universidades, Cultura y Deportes. Dichas tarjetas se comenzaron a repartir en el mes de septiembre del año pasado al alumnado de Educación Primaria. El presidente del Consejo Escolar de cada centro también es receptor de una tarjeta que le permite la compra de los materiales de reposición o de alumnado sobrevenido.
Por otro lado, los comerciantes adheridos a esta acción, que pueden pertenecer o no a las asociaciones provinciales, sólo pueden vender los libros de texto determinados por cada centro educativo. Para hacerlo han tenido que aceptar los términos del convenio firmado en su momento por el presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, con la Caja General de Ahorros de Canarias, la Caja Insular de Ahorros de Canarias y las Asociaciones de Empresarios del Comercio del Libro de ambas provincias, cuyos principales requisitos son los siguientes: tener su empresa legalizada para la venta de libros de texto, que el comercio tenga actividad durante todo el año y que cuenten con datáfonos de las entidades bancarias incluidas en el convenio.
Por su parte, las entidades de ahorro suministraron a la Consejería las tarjetas necesarias para el desarrollo de la acción y ayudaron en su control informático.