SAN BARTOLOMÉ DE TIRAJANA, 8 Feb. (EUROPA PRESS) -
La instalación de un ascensor en el faro de Maspalomas es una de las actuaciones proyectadas por el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana para continuar con las obras de reforzamiento y mejora del edificio, en una nueva fase en la que también se acondicionará la carpintería exterior y se rematarán actuaciones complementarias.
Una de ellas es la terminación de las paredes del interior del edificio, cuyas piedras se dejan a la vista y se rellanan los espacios que quedan entre ellas con recortes de la cantera de Arucas (ripiado), sin encalar ni pintar el resultado final.
Así lo recoge el proyecto redactado para la rehabilitación del Faro, cuyos técnicos aseguran que estas obras cumplen con la Ley sobre Patrimonio Histórico de Canarias, al tratarse de un bien protegido que no admite la alteración de sus características tipológicas. Por ese motivo se respeta el exterior y la composición interior, que está integrada por arcos, huecos y escaleras.
Aparte de la colocación de un elevador para cumplir con la ley de accesibilidad, otra de las actuaciones previstas es cubrir el patio interior con materiales propios de la época, así como restablecer la decoración de las vigas de los dos forjados y terminar los pilares del perímetro interior, sin olvidar el mantenimiento que precisa la carpintería por la erosión del mar, que habrá que lijar, sanear y barnizar. El plazo previsto para la ejecución de las obras se estima en tres meses y su presupuesto asciende a 180 mil euros.
Por el momento, y con el objetivo de darle un impulso renovado al recinto para que esté definitivamente acondicionado para su uso, la Concejalía de Contratación, que dirige José Juan Santana, ya ha iniciado el trámite administrativo por el que Santana Cazorla va a continuar con esta nueva fase de remozamiento, empresa que hasta el momento ha sido la responsable de realizar las labores de recuperación.