Manolo Blahnik, sorprendido por no ser "ni científico ni profesor"

Juan Esteban Beckman Abramson, Antonio Martinón y Manolo Blahnik
PHOTOGRAPHER: EMETERIO SUAREZ GUERRA
Actualizado: miércoles, 11 mayo 2016 16:59

SANTA CRUZ DE TENERIFE, 11 May. (EUROPA PRESS) -

   La Universidad de La Laguna ha celebrado este miércoles el solemne acto de investidura como Doctores Honoris Causa de Juan Esteban Beckman Abramson, investigador y colaborador del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), y Manolo Blahnik, diseñador de moda, especializado en calzado.

   En su discurso, el diseñador de origen palmero recordó cómo en los años 50 su familia quiso que él estudiara en la Universidad de La Laguna, si bien los problemas de salud y su confesa falta de interés le previnieron de hacerlo.

   En su lugar, Manolo Blahnik acabó en la Universidad de Ginebra, en donde se abrió al mundo que luego conocería tan bien. "Se cumple una vez el dicho de que no hay mal que no por bien no venga", bromeó.

   Blahnik afirmó que, si bien agradece el nombramiento concedido, él se considera un "dibujante de zapatos e industrial", por lo que no sabe si reúne méritos suficientes para recibir el honor que hoy le otorga la Universidad.

   Reflexionó que, como no es ni científico ni profesor y tampoco creía que se le concediera la distinción por su periplo vital, era mejor si optaba por hablar de su profesión "como dibujante".

   Explicó que en su labor parte del análisis, de la observación y de la grabación mental de lo que ve diariamente, tamizado por su bagaje cultural como cinéfilo y aficionado al arte y a los museos, sin olvidar las sensaciones que le ofrece la propia naturaleza.

   El siguiente paso de su proceso creador es el dibujo del modelo, la elección de los materiales y, finalmente, un momento que considera "muy especial" y del que disfruta mucho: la confección con sus propias manos del primer zapato, en el cual colabora con un grupo de profesionales que le ha seguido durante 45 años.

   Sobre su vida "ajetreada y cosmopolita", que le lleva a viajar por todas partes para promocionar sus creaciones, confiesa que es "una carga" que trata de llevar dignamente al entender que es necesaria para difundir su trabajo; pero sigue insistiendo en que de lo que realmente disfruta es de la observación de lo que le rodea y su reflejo en los zapatos.

   Cerró su intervención agradeciendo a la Universidad de La Laguna el nombramiento de Doctor Honoris Causa en condición "de artesano zapatero palmero", de lo que dijo estar "orgulloso de serlo".

ESTAR EN LA VANGUARDIA.

   Juan E. Beckman, por su parte, reflexionó sobre la perenne vigencia que tiene el estudio de los astros en la actualidad y reivindicó, en el inicio de su intervención, que una universidad moderna "tiene que saber estar en la vanguardia de lo profesional sin caer en la trampa de formar solamente cuadros al servicio de la economía".

   Rememoró a tres personas que consideró responsables de la base de sus conocimientos pese a que, curiosamente, ninguno es astrofísico: John Hesse, su profesor de Matemáticas en el King Edward VII School Scoffield; Claude Hurst, su tutor de Física en el Jesus College de Oxford, y John Houghton, también tutor en el mismo centro e impulsor del Panel Internacional sobre el Cambio Climático de las Naciones Unidas. También quiso recordar al catedrático de Astrofísica de la ULL Carlos Sánchez Magro, responsable de su llegada a Tenerife.

   Aprovechó la ocasión para repasar la historia de la Astronomía desde el siglo XVII, época en la que el ser humano t"enía una relación con las estrellas mucho más directa". Hizo un breve repaso acerca del conocimiento que se ha adquirido durante este tiempo acerca del movimiento de las galaxias o el porqué de que el cielo nocturno sea oscuro.

   Incluso se refirió a las constelaciones del Zodiaco, criticando la creencia de que la posición del Sol el día del nacimiento determine el carácter. Por contra, propuso una observación mucho más científica de las constelaciones, poniendo como ejemplo la de Leo, la cual varía de forma al moverse el observador. De este modo, proyectó una animación que mostraba que, si se variaba el punto de vista, la traza de dicha constelación podría corresponderse con la figura de un león, la de una diosa tumbada o, incluso, la de un zapato de Manolo Blahnik, momento que arrancó un aplauso del público.

   También tuvo palabras divulgativas acerca de otra creencia ancestral, la alquimia como precedente a la química. El sueño de aquella creencia medieval se logró en el siglo XX, en parte gracias a la labor de de los astrofísicos.

   También dedicó una arte de su intervención a reivindicar la importancia de la formulación del método científico, de la ley de la gravedad (y de la teoría de la relatividad general, su sucesora): "Estas dos teorías son dos de los logros humanos más importantes de todos los tiempos, a un nivel igual que la obra musical de Bach, Mozart o Beethoven, o la literatura de Cervantes o Shakespeare".

   Finalmente, tuvo palabras de cariño hacia la disciplina que ha inspirado su vida, la Astronomía. El periplo que le ha llevado de Leeds a Tenerife le permite describir Canarias como un polo de atracción para científicos de todas la edades unidos en la búsqueda de conocimientos profundos del universo.

Premio a dos observadores

   El último en intervenir fue el rector de la ULL, Antonio Martinón, quien dio una explicación a quienes pudiera sorprender que se invistiera conjuntamente a dos personalidades de campos tan alejados.

   "Si pensamos un poco, descubrimos inmediatamente que realmente usan el mismo método. Así nos lo han dicho en sus intervenciones", reflexionó. "Blahnik parte de la observación del arte y de la naturaleza más cercana, mientras que Beckman fija su atención en la mirada al cosmos. Ambos son observadores muy atentos de la realidad", destacó.

   Martinón prosiguió con las relaciones. Así, mientras el astrofísico procede a la formulación de una teoría científica, el diseñador confecciona su calzado. "Ambos se convierten en creadores a través de un complicado proceso de imaginación y audacia intelectual" y, posteriormente, en "ejecutores de los experimentos que ellos mismos diseñan". Destacó, además, que tanto Beckman como Blahnik "trabajan en equipo, no son creadores aislados y, además, poseen alumnos, discípulos y seguidores".

   Las analogías entre ambos siguen: "Blahnik es un palmero instalado en Londres para llegar al mundo entero y Beckman es un inglés que ha venido a Canarias para hallar en los observatorios de La Palma un lugar para llegar muy lejos en el Cosmos. Uno es canario en Inglaterra y el otro es un inglés en Canarias. Aunque ambos son ciudadanos del mundo con un espíritu universal".

   Para el rector, los agasajados son dos figuras del Arte y de la Ciencia que reciben este doctorado Honoris Causa en el año que se conmemora el cuarto centenario de la muerte del español Miguel de Cervantes y del británico William Shakespeare, "dos representantes del más alto nivel de nuestra cultura".