La Pendiente es la primera bodega grancanaria inscrita en el registro de productores de agricultura ecológica

Actualizado: viernes, 6 marzo 2009 19:21

LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 6 Mar. (EUROPA PRESS) -

La Pendiente se ha convertido en la primera bodega grancanaria inscrita en el registro de productores de agricultura ecológica integrada en el Instituto Canario de Calidad Agroalimentaria (ICCA), organismo autónomo dependiente de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación del Gobierno de Canarias.

De esta forma, La Pendiente ha elegido esta modalidad de producción "lo que supone un hito para la actividad agrícola de esta isla", según informó el Ejecutivo canario en nota de prensa. Por ello, hoy la consejera canaria del área, Pilar Merino, visitó las instalaciones de la bodega.

La Pendiente, entidad gestionada por Celso Castellano, produce los vinos Caletón y Marisma, de la Denominación de Origen (D.O) Vinos de Gran Canaria, con un "volumen de unas 1.500 botellas", ya que "lleva años cultivando según los criterios de la agricultura ecológica y ha considerado la importancia de dar valor añadido a su producto".

Merino, además de visitar la bodega, también ha mantenido hoy un encuentro con responsables del sector vinícola del archipiélago y la empresa Vidrieras Canarias, encuentro al que asistió la vicepresidenta del Parlamento de Canarias, Cristina Tavío, el director del ICCA, Guillermo Díaz Guerra, y el diputado Carlos Ester.

Asimismo, la consejera de Agricultura calificó de "vital importancia" el encuentro que se produjo después de una visita a las instalaciones de Vidrieras Canarias, situadas en Telde, que también contó con la presencia del vicepresidente autonómico de ASINCA, Pedro Ortega, y que permitió conocer de cerca las inquietudes del sector.

MÁS DE 10.000 HECTÁREAS

Merino destacó que "cualquier elemento" que influya en el coste del vino "es una distorsión" para los productos canarios, ya que las islas tienen una superficie de viñedo plantada "tan reducida" en comparación con la de sus competidores, a pesar de ser el cultivo "más importante" de las islas en extensión, con más de 10.000 hectáreas, ya que compite con vinos de calidad y bajo precio como los que se fabrican en la península.

Asimismo, el ICCA ha hecho un "exhaustivo" estudio de estos costes de producción del vino canario y ha cuantificado el "sobrecoste" de producción que soportan las bodegas por el "mero hecho de producir en el archipiélago, en el que influye principalmente la insularidad, por el factor transporte, entre otros".

De todos modos, en la reunión Vidrieras Canarias apuntó a la innovación e introducción de nuevos productos en su catálogo de ofertas y los requisitos mínimos que demandan para ser proveedores en exclusiva de vidrio a las bodegas isleñas.

Además, se baraja la posibilidad de agrupar compras a través de la empresa pública Gestión del Medio Rural de Canarias S.A, que la consejera se comprometió a tener en cuenta, con el fin de centralizar los pedidos de las bodegas y permitir negociar paquetes de compra con Vidrieras Canarias.

Asinca, por su parte, reconoció el "papel fundamental" de las 300 bodegas canarias como "fuente de creación de empleo y parte del tejido industrial productivo del archipiélago", y mostró su disposición a lanzar reivindicaciones conjuntas para reforzar este subsector.

También se destacó la contribución del vino a "generar una riqueza" en las islas que, "a veces, no es lo suficientemente valorada", y por la que "quiere apostar la Consejería, pues supone una aportación a toda la cadena productiva". Para ello, desde la Consejería de Agricultura se pretende fomentar el consumo interior y turístico para ayudar al bodeguero y al cosechero, "remarcando entre el mercado potencial su alta calidad".