La plataforma 'Canarias, 1.500 Km de Costa' avisa de los riesgos del uso de piscinas portátiles para los menores

Niño en piscina hinchable
Niño en piscina hinchable - CEDIDA POR 'CANARIAS 1.500KM DE COSTA'
Publicado: jueves, 23 julio 2020 13:05

LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 23 Jul. (EUROPA PRESS) -

La plataforma 'Canarias, 1.500 Km de Costa' ha advertido de los riesgos en el uso de piscinas hinchables, portátiles y domésticas para los menores, después de que se haya producido un aumento de más del 250 por ciento en la compra de las mismas, ya que puede representar un "serio riesgo para la seguridad de todos", especialmente de menores.

Al respecto, se refiere al creciente aumento del alquiler de casas rurales con piscina o la nueva construcción de éstas en casas particulares de campo o de la costa pero "la mayoría de ellas sin contar con los mínimos elementos de seguridad", lo que entiende implica "un motivo de preocupación" para la plataforma para prevenir ahogamientos.

En este sentido, incide en la necesidad de extremar las precauciones y no perder de vista a los menores durante el baño porque advierte de la "falsa sensación de seguridad" que genera este tipo de instalaciones acuáticas, para añadir que "bastan 27 segundos para que un bebé de 12 meses de edad pierda la vida ahogado", según señaló la plataforma en nota de prensa.

La plataforma para la prevención de accidentes acuáticos, colaboradora oficial de Bandera Azul y auspiciada por el Cabildo de Gran Canaria, con la colaboración del Gobierno de Canarias a través de la Dirección General de Seguridad y Emergencias y la Concejalía de Ciudad de Mar de Las Palmas de Gran Canaria, se centra en datos estadísticos cotejados por la Asociación Española de Técnicos en Salvamento Acuático y Socorrismo (AETSAS), para lamentar que seis menores han perdido la vida en lo que va de año 2020 en piscinas domésticas no vigiladas en España. Añade que en todo el año 2019 un total de 10 menores murieron por ahogamiento en el mismo entorno en España.

Por otro lado, recuerda que la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) expone que al finalizar el 2019 se había contabilizado la muerte de 20 menores en piscinas domésticas, hinchables o portátiles.

En relación con ello cita varios incidentes de esta naturaleza protagonizados por niños con resultado fatal y que considera que se "podrían haber evitado con haber extremado las precauciones" como, dijo, el ocurrido el 16 de julio cuando un menor de 2 años fallecía ahogado en una piscina particular en Ciudad Real.

Para evitar este tipo de situaciones aconseja no olvidar "nunca" a los niños en el medio acuático, utilizar algún elemento de flotabilidad "adecuado al tamaño del niño" para evitar que se salgan al levantar los brazos; tener en cuenta que los flotadores pueden darse la vuelta dejando al niño boca abajo, subrayando que los "más efectivos" son los chalecos y los denominados churros, que además permiten una "gran movilidad y una variedad de ejercicios para facilitar el aprendizaje del niño". Además invita a enseñar al menor a nadar desde el primer año de vida.

Por otro lado, para realizar un correcto y seguro uso de los espacios acuáticos particulares aconsejan tapar la piscina con una cubierta sólida al finalizar el tiempo de baño; en piscinas de recién nacidos no se deben superar los 15 centímetros; en las más pequeñas debería vaciarse y volver a llenarse cada día con agua del grifo ya clorada; si tiene escalerilla de acceso debe retirarse cuando no haya un adulto.

En cuanto a las piscinas de construcción debería estar rodeada por una verja de al menos 1,30 de altura y con barras que no deben estar separadas entre sí por más de 11 centímetros; tener una puerta de acceso con un pestillo o traba; o restringir a los más pequeños un área de la piscina.

Finalmente recomienda evitar las zambullidas, sobre todo de cabeza, así como carreras cerca de la piscina, no utilizar ningún tipo de material (pelotas, objetos hinchables, etc.) que pueda suponer un riesgo para los usuarios, e instalar una alarma para piscina para que en caso de una caída, una parte fija instalada en el borde o en el interior de la piscina emite por radio una señal sonora a la base, entre otras.