SANTA CRUZ DE TENERIFE, 21 Sep. (EUROPA PRESS) -
En la noche del día 20 al 21 de septiembre, policías de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana de Santa Cruz de Tenerife prestaron dos servicios humanitarios, evitando que dos personas se quitaran voluntariamente la vida.
El primero de los servicios fue a las 22.45 horas del día 20 de los corrientes en la avenida de San Sebastián, lugar al que los policías fueron comisionados por la sala del 091, ya que había un individuo que se había cortado las venas.
Una vez en el lugar, los policías subieron hasta el descansillo del último piso, donde encontraron a un joven, de 20 años de edad, quien les dijo que se había cortado las venas y se había tomado unos barbitúricos.
Los policías llamaron a una ambulancia cuyo personal atendió al joven y lo trasladó al hospital de La Candelaria, donde quedó ingresado.
A las 3.15 horas, varios indicativos policiales fueron comisionados hasta Llano Alegre, donde al parecer otro individuo se había cortado las venas.
Una vez en el lugar, los agentes se entrevistaron con la hermana el presunto suicida, la cual les manifestó que momentos antes su hermano, de 25 años de edad, había intentado cortarse las venas con un cuchillo.
Los agentes entraron en la vivienda comprobando que en ella se encontraba la madre y que el joven se había encerrado en el cuarto de baño.
Justo cuando se disponían a tocar en la puerta, el joven la abrió, portando un cuchillo de grandes dimensiones en sus manos, y al advertir la presencia policial lo esgrimió a la altura de su yugular.
Debido a ello, la madre de la víctima perdió el conocimiento, cayendo al suelo, por lo que solicitó una ambulancia medicalizada.
Entre los policías y los propios técnicos de la ambulancia convencieron al individuo para que desistiera de su actitud, arrojando el cuchillo al suelo, y les acompañó hasta la ambulancia.
Una vez allí, y por causas desconocidas, el joven volvió a entrar en crisis, mostrando de nuevo una agresividad notable, comenzando a propinar patadas y golpes tanto a la ambulancia como a los vehículos policiales, por lo que tuvo que ser reducido por todos los actuantes, introducido en el vehículo policial y trasladado al hospital de La Candelaria, donde quedó ingresado.