LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 26 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Pleno del Cabildo de Gran Canaria rechazó, con los votos de los consejeros del Partido Popular (PP), una moción presentada por Nueva Canarias (NC-NGC) y después ampliada por el Partido Socialista Canario (PSC-PSOE), que planteaba proceder al cese de ahora en adelante de cualquier cargo público de la Corporación insular que estuviera imputado en firme en un caso de corrupción.
Aunque en un principio, el PP aceptó la moción presentada por el portavoz de NC, Carmelo Ramírez, en la que únicamente se pedía que el Cabildo de Gran Canaria manifestara "su preocupación y condena por la existencia de supuestos casos de corrupción en la gestión de las instituciones públicas, que tanto descrédito están ocasionando en la gestión de los organismo públicos", tras la presentación de dos enmiendas del PSC, que contaron con el visto bueno de NC, finalmente decidieron votar en contra.
Las dos enmiendas presentadas por el portavoz del grupo socialista, José Miguel Pérez, pretendían, por una parte, impedir que cualquier cargo público imputado en firme en un caso de corrupción pueda formar parte del Cabildo, y por otra, que los distintos grupos políticos se comprometieran a expulsar de su seno y solicitar el cese como cargo público de personas imputadas en casos vinculados con actividades corruptas.
Según José Miguel Pérez, mediante la aceptación de esta moción el Cabildo tenía la oportunidad de trasladar a la opinión pública y adoptar una actitud "de absoluta intransigencia con la lacra de la corrupción".
Sin embargo, el grupo de gobierno rechazó la moción porque, a su juicio, "pasa por encima del derecho a la presunción de inocencia y se desliza en una línea peligrosa a la hora de salvaguardar los derechos de los ciudadanos".