SANTA CRUZ DE TENERIFE, 21 Dic. (EUROPA PRESS) -
El proyecto de la ley canaria del Transporte por Carretera salió adelante para su discusión en la Cámara ante la sorpresiva retirada de la enmienda a la totalidad que había propuesto el Partido Popular de Canarias (PP). Los populares habían justificado su iniciativa en la "falta" de consenso del sector sobre la norma pero hoy su portavoz, Jorge Rodríguez, explicó que tras reunirse con los transportistas "no existían motivos para dejar de apoyar la medida". La otra enmienda a la totalidad, presentada casi simultáneamente por el Partido Socialista Canario (PSC) fue rechazada con los votos del PP, de Coalición Canaria (CC) y del Grupo Mixto.
La actuación de hoy de los populares recuerda la que ese mismo grupo efectuó a mediados de mes, cuando en la comisión de Presupuestos y Hacienda tampoco defendió la enmienda a la totalidad que había presentado y optó por discutir de manera puntual sus correcciones al presupuesto autonómico de 2007. En esa oportunidad, a veces apoyó al Gobierno y otras veces se abstuvo pero no llegó a respaldar al Partido Socialista Canario (PSC) en sus enmiendas más polémicas.
Antes de conocerse la decisión del PP, el diputado nacionalista José Miguel Barragán había ofrecido "mejorar" los aspectos "ambiguos y que carecen de desarrollo" en la norma del transporte por carreteras, tras la intervención del diputado socialista Julio Cruz, quien criticó con fuerza el proyecto de ley.
Cruz apuntó que la norma "fomenta la inseguridad jurídica, no delimita las actuaciones de los diferentes agentes del sector, carece del respaldo de los transportistas y de un diagnóstico previo de las situación del sector para valorar las necesidades de los operadores, y sólo es un lavado de cara del Ejecutivo tras tres años de incumplimientos para dar la impresión de que se ha ocupado del asunto".
Además, el proyecto de ley "carece de ficha financiera, incentiva la ruptura del mercado turístico, provocará la desaparición de las pequeñas flotas de transportistas canarios y deja al desarrollo reglamentario más de 100 aspectos que puede que no se desarrollen nunca o tarde, lo que hará inviable el cumplimiento de la norma".
El PP adelantó que su eventual respaldo al proyecto de ley dependerá de que el desarrollo reglamentario se produzca "a continuación de la aprobación de la ley, para evitar que quede vacía de contenido" y de que el Gobierno vigile su cumplimiento para lo que el PP propondrá efectuar una comparecencia "con una periodicidad determinada ante una comisión de Transportes para seguir la implementación de la norma y velar por la calidad de su seguimiento".