Segura dice que en Canarias hay un "virus lamentable de exhibicionismo político" en inmigración

Actualizado: domingo, 28 mayo 2006 22:00


SANTA CRUZ DE TENERIFE, 28 May. (EUROPA PRESS) -

El delegado del Gobierno en Canarias, José Segura, manifestó ayer que en Canarias hay un "virus lamentable de exhibicionismo político" en materia de inmigración al tiempo que defendió las actuaciones del Gobierno central ante la llegada de inmigrantes a las costas canarias en los últimos días.

Segura se abstuvo así de opinar sobre el llamado que hizo el jueves pasado la consejera de Empleo y Asuntos Sociales del Gobierno de Canarias, Marisa Zamora, al presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, para que visite las islas y "compruebe por sí mismo" la situación de los centros de acogida para los inmigrantes.

Zamora expresó en esa oportunidad que "el presidente Zapatero niega la saturación de los centros de acogida para los inmigrantes porque su partido lo tiene aislado de los problemas pero debería venir a las islas a 'mojarse' en el tema de la inmigración ya que la gente lo valoraría en positivo". Añadió que se trata de un problema que "ha desbordado" al Gobierno canario.

La consejera, que reconoció la labor del delegado del Gobierno en las islas "porque insta al Ejecutivo central a que ponga remedio a esta situación", se mostró crítica con las actuaciones de la Administración española. "Aunque este problema se veía venir, la tardanza del Estado en afrontarlo lo ha convertido en el primer problema de ámbito nacional que existe en estos momentos".

En cambio, Segura apuntó que en Canarias se están produciendo "excesivas declaraciones" entre los cargos políticos del archipiélago en los temas de inmigración y se negó a valorar la petición de Zamora. "Yo no respondo a la consejera porque es un 'juego de patio de colegio' al que no me quiero sumar en un momento en el que en Canarias somos testigos de una tragedia humanitaria. Me sorprende que los periodistas no me pregunten sobre la propia tragedia humanitaria, sino sobre declaraciones que ha hecho un cargo público".

A continuación, el delegado del Gobierno comenzó a defender las actuaciones en Canarias del Ejecutivo central para gestionar la situación que ha provocado la llegada de numerosas pateras en los últimos días. "Es una verdad incuestionable que el presidente Zapatero ha hecho más por las islas en materia de inmigración en dos años de gobierno que el conjunto de las actuaciones del Ejecutivo estatal en los ocho años anteriores", afirmó.

Entre otros aspectos, Segura recordó el "despliegue" diplomático del Ejecutivo nacional "con otros gobiernos de la región no equiparables a los europeos con los que a veces resulta difícil el diálogo". El delegado se lamentó por quienes están instalados en "el caballito del lloriqueo" y defendió la "sensibilidad" del Ejecutivo estatal ante la "tragedia" humanitaria que afronta Canarias.

Estado de opinión excesivamente irascible. Segura también se manifestó acerca de las manifestaciones de rechazo de los vecinos de La Montañeta, en el municipio tinerfeño de Garachico, contra el traslado de menores inmigrantes a un centro de acogida de esa localidad.

"Hay una espiral constante a ver quien es mas bárbaro haciendo declaraciones que se pueden calificar de xenófobas. Es una espiral en la que participamos todos, tanto los periodistas como los responsables institucionales. La suma de esos mensajes genera, quizás de forma involuntaria, un estado de opinión excesivamente irascible en la población", afirmó Segura.

"Hace un mes ya aseguré que ninguno de los inmigrantes que han llegado en cayucos al archipiélago ha tenido la oportunidad de quedarse libre para pasear por los parques o las calles de ningún municipio canario", recordó el delegado. "El Gobierno de España ha permitido la repatriación de los inmigrantes que reúnen los requisitos para ello, mientras que el resto es absorbido por las demás comunidades autónomas en nombre de la solidaridad nacional".

Segura concluyó de manera tajante que "los ciudadanos de otras razas que se ven por las calles canarias no han venido abordo de cayucos".

El delegado del Gobierno central en las islas solicitó a los cargos públicos que demuestren "altura moral" ante "este fenómeno humanitario", en vez de "meternos en el charco a ver quien dice más barbaridades", porque las declaraciones de ese tipo "pueden traer consecuencias en el comportamiento colectivo que nos dolerá en el futuro". .