SANTA CRUZ DE TENERIFE, 27 Sep. (EUROPA PRESS) -
Faconauto, la federación que agrupa a los concesionarios oficiales de todo el país, reveló hoy que los tinerfeños gastaron una media de 16.239 euros en la compra de su vehículo durante el pasado mes de agosto, lo que supone un descenso del 6,9 por ciento con respecto al mismo mes del año anterior. La federación aludió a los datos de la Dirección General de Tráfico (DGT). Por el contrario, la media nacional del gasto se ubicó en 21.436 euros, lo que supone un 1,5 por ciento más que en agosto de 2006.
Faconauto atribuyó la tendencia nacional a la "crisis" de las hipotecas 'subprime' en Estados Unidos y al "menor" crecimiento económico registrado por Francia y Alemania en el segundo trimestre de 2007, que suponen, "paradójicamente, un cierto aliciente para el sector automovilístico español porque contribuyen a frenar el crecimiento de los tipos de interés, que es una de las variables más influyentes en la progresiva debilitación de la demanda".
Según el presidente de Faconauto, Antonio Romero, "con la sombra del precio del dinero como amenaza más importante, la revisión al alza de la Contabilidad Nacional de España de 2003 a 2005 (una décima más cada año), el crecimiento económico registrado por la economía española en el segundo trimestre (cuatro por ciento) y la moderación del IPC hasta el 2,2 por ciento en julio, completan un marco positivo para el mercado".
A pesar de este cuadro macroeconómico, el sector automovilístico sigue presentando "claros síntomas de debilidad", especialmente en lo que respecta a la demanda de particulares, debido, por un lado, "al encarecimiento del precio del dinero y a la falta de confianza de los consumidores y, por otro, a la cancelación parcial del Plan Prever, cuyas bajas acumulan una caída cercana al 30 por ciento hasta agosto".
Ante esta situación, fabricantes y concesionarios "están reforzando sus políticas promocionales con el fin de dinamizar el mercado y alentar la venta de vehículos nuevos. En agosto las promociones crecieron un 5,8 por ciento mientras que en lo que va de año acumulan ya un incremento del 6,2 por ciento".
Faconauto recordó que las ventas de turismos y todoterrenos en España cayeron un 2,9 por ciento el pasado mes de agosto, con un total de 99.434 vehículos matriculados. El mercado de particulares descendió un 7,7 por ciento en agosto, mientras que el de empresas, empujado por las automatrículas efectuadas para compensar la debilidad de la demanda de particulares, creció un 13,2 por ciento el pasado mes. Las ventas de alquiladores, por su parte, cayeron un 13 por ciento en agosto, compensando parcialmente los fuertes avances de mayo y junio.
Por otro lado, los automovilistas españoles que decidieron comprar un coche en agosto mes se inclinaron por la compra de vehículos con una dimensión "ligeramente superior a la del mismo mes del año anterior". Los coches comercializados durante el pasado mes contaron con una batalla media de 2.618 milímetros, un 0,05 por ciento más que en agosto de 2006.
La eficiencia energética de los motores disminuyó un 0,04 por ciento, hasta situarse en 17 kilómetros recorridos con un litro de combustible, mientras que la potencia media del coche matriculado en agosto creció un 2,7 por ciento, hasta los 119,9 CV.
Este incremento de la potencia media provocó que las emisiones medias de dióxido de carbono por coche matriculado apenas se redujeran en agosto, situándose en 157,2 gramos por kilómetro recorrido (0,1 por ciento), lo que supone un nivel muy por encima del compromiso de 140 gramos por kilómetro adquirido por los fabricantes de automóviles con la Unión Europea para 2008.
Durante el pasado mes de agosto, el precio medio del carburante se situó en 1,053 euros por litro, un 1,3 por ciento menos, mientras que el coste medio por kilómetro recorrido fue de 0,062 euros, lo que supone un descenso del 1,3 por ciento con respecto a agosto de 2006.
Según Faconauto, la caída del precio de los carburantes se debió a la estabilización del precio del petróleo en agosto que moderó su tendencia después de alcanzar su cotización máxima a primeros de este mes, causada por el descenso de las reservas de Estados Unidos y el temor al posible impacto del huracán Dean en la industria petrolera del Golfo de México.