Siete familias lamentan que el alcalde no haya cumplido, un mes después de asegurar las laderas, con su compromiso para 'reparar' sus hogares
SANTA CRUZ DE TENERIFE, 2 Jul. (EUROPA PRESS) -
Las familias afectadas desde el pasado 30 de diciembre por los desprendimiento de varias roca de una de las laderas del barrio santacrucero de María Jiménez han mostrado su indignación después de seis meses esperando a que la Gerencia de Urbanismo asuma las tareas de valoración y rehabilitación de las viviendas para regresar a sus casas.
En este sentido han lamentado que el alcalde de la ciudad, Miguel Zerolo, que se comprometió con ellos a dar las órdenes oportunas con tal efecto, tras asegurar las piedras de las laderas, no lo haya hecho y por tanto se muestran sorprendidas porque después de seis meses de aquella tragedia Zerolo no haya dado las órdenes oportunas para que el Área de Urbanismo asuma las tareas de valoración del estado de las viviendas y su rehabilitación.
Según han revelado a Europa Press los vecinos, el alcalde santacrucero aún no ha dictado la encomienda al área que regenta Luz Reverón para iniciar las obras que les permita volver a sus casas.
"Primero nos dijeron que mientras se hacían las obras de aseguramiento de la ladera no podían trabajar en nuestras casas, pero ya las obras de la ladera han terminado hace más de un mes y ahora viviendas municipales nos dice que no pueden empezar a trabajar hasta que el alcalde le encargue las obras a través de una encomienda", criticó uno de los afectados.
"Para nosotros la actitud de Zerolo no tiene explicación", añadió indicando que el primer edil no tiene "interés por la suerte de los vecinos", lamentaron insistiendo en que llevan ya más de medio año esperando volver a sus hogares.
SEIS MESES FUERA DE CASA
El 30 de diciembre de 2008 se desprendieron piedras de gran volumen en la ladera de María Jiménez que si bien no causó daños personales de consideración, quedaron dañadas varias viviendas y un camino de acceso, lo que motivó el desalojo de siete familias.
En los días siguientes, en una reunión entre las familias afectadas y el alcalde de Santa Cruz de Tenerife, éste se comprometió a darle un trámite de urgencia a todas las actuaciones que fueren necesarias con la finalidad que los vecinos pudieran volver a sus casas, urgencia que no han visto por ningún lado, según señalan los vecinos.
