Autónomos de La Rioja rechazan el Estatuto de estos trabajadores y consideran que "traiciona" su carácter

Actualizado: miércoles, 3 mayo 2006 19:34

LOGROÑO, 3 May. (EUROPA PRESS) -

La Asociación Intersectorial de Autónomos de La Rioja ha transmitido a la organización nacional a la que pertenece su "rechazo total" a la tramitación del Estatuto del Autónomo. Critican, sobre todo, la nueva figura del 'autónomo dependiente' que crea el proyecto, que, en su opinión, "traiciona el carácter y la singularidad de los empresarios y profesionales autónomos".

CEAT-La Rioja, integrada en la Federación de Empresarios (FER), mostró hoy su preocupación por el inicio de la tramitación parlamentaria del proyecto de decreto del Estatuto Autónomo, por no considerarlo "no es necesaria ni oportuna".

A través de un comunicado, CEAT advirtió de que el nuevo Estatuto "pretende establecer una norma en la que se regulan colectivos tan heterogéneos, como son desde el socio que ejerce funciones directivas en una gran empresa, hasta la actividad de un comerciante", y criticó que en ningún país de Europa existe una normativa similar.

CEAT La Rioja aclaró que los empresarios y profesionales autónomos "no son ni más ni menos que emprendedores que tienen como finalidad que su empresa sea rentable en el ejercicio de su actividad empresarial diaria, y la única característica que les distingue es la cotización a un régimen específico de la Seguridad Social".

La Asociación señaló que los empresarios autónomos precisan para actuar de una mayor transparencia de los mercados, en el marco de una legislación civil y mercantil adecuada a la realidad de su propia actividad, "que les permita avanzar en términos de rentabilidad, obtener mejoras en las prestaciones sociales y contar con el respaldo de organizaciones fuertes que defiendan los planteamientos y ventajas de una economía de escala".

CEAT La Rioja igualmente contempló "con perplejidad y asombro" la creación en el proyecto de decreto de la nueva figura del 'autónomo dependiente', aquél que factura más del 75 por ciento a una única empresa.

Explicó que la norma dota a esta figura de una relación exclusiva de carácter laboral, "tratando al empresario autónomo como si fuera cualquier empleado en una empresa, puesto que le otorga derechos en la negociación colectiva sobre aspectos como el descanso semanal, la jornada, o las vacaciones anuales".

A juicio de esta asociación, al autónomo, el elegir un sólo proveedor, "no debe llevar a catalogarle de una u otra forma o de concederle unos derechos, que menoscaban la propia organización de su empresa y que lastran definitivamente su competitividad".