El Ayuntamiento habilitará provisionalmente un tramo de Calleja Vieja para facilitar el acceso al nuevo Maristas

LOGROÑO 27 Ago. (EUROPA PRESS) -

El Ayuntamiento de Logroño habilitará de forma provisional un tramo de Calleja Vieja para facilitar la entrada al nuevo colegio de Maristas.

Se acondicionará, para ello, esta vía con aceras y un único sentido, a excepción de un tramo de unos 100 metros, el más cercano a Avenida de Madrid, que mantendrá la doble dirección para permitir el acceso a una urbanización residencial y a la parroquia de los Franciscanos.

Será, según adelantó hoy el concejal de Movilidad, Domingo Dorado, la primera actuación que se hará en relación con los accesos al nuevo centro escolar, "enlazando con los nuevos accesos también al aparcamiento del Hospital San Pedro", que están en construcción. Dorado, junto con el alcalde de Logroño, Tomás Santos, y el concejal de Desarrollo Urbano, Miguel Gómez Ijalba, visitó este mediodía el desarrollo de estos trabajos.

Incidió en que "en contra de lo que está diciendo el PP, no queremos que, desde el colegio, se salga al cruce con la Circunvalación, una vía rápida por la que pasan 400 ó 500 vehículos; es preferible que hay algún atasco en Avenida de Madrid, antes de que se produzca algún accidente grave en este enlace".

Por ello, el equipo de Gobierno ha optado "por prohibir la salida a Circunvalación, pero sí permitir la entrada". Con este fin, se ejecutará un proyecto, presupuestado en 300.000 euros, "como un añadido a la obra del San Pedro, que son unos 300 metros, con carril en dos sentidos y carril bici". Se prevé que esta obra esté para finales de año.

"Será -afirmó el concejal- más fácil y rápida que Calleja Vieja", a lo que sumó que el colegio "contará con un acceso de entrada y salida desde la calle Pedregales".

Además, el Ayuntamiento prevé realizar otro proyecto, con el horizonte del verano de 2008, para prolongar un vial de entrada y salida por la calle Gustavo Adolfo Bécquer, con dos carriles y rotonda, "con lo que se contarán con dos viales, que servirán para el centro escolar y para el hospital".

Para Dorado, "lo que no vamos a hacer es habilitar Calleja Vieja para los 66 alumnos de Lardero que tiene Maristas". En esta línea, destacó que, con una anchura actual de la vía de 5,5 metros, "salen aceras de 1,5 a 2 metros para los peatones", a lo que añadió que, en lugares puntuales, se cubrirán las acequias existentes.

Este tramo inicial, junto con el de doble sentido, "se repensará" una vez que se haya solucionado por completo el resto de accesos al colegio.

A juicio del alcalde, Tomás Santos, "esta de los accesos a Maristas es otra de las obras inconclusas e inexplicadas" que el actual equipo de Gobierno anterior heredó del anterior Ejecutivo municipal del PP "que no pensó que se iba a hacer un colegio para 1.200 alumnos, sin accesos".

Fue, según dijo, junto con las entradas al San Pedro, algo en lo que "nos pusimos a trabajar en el primer día que entramos a gobernar".