LOGROÑO 9 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento y la Universidad de La Rioja colaborarán para realizar una reurbanización del campus, "para darle unidad y personalidad propia", y en la construcción de un nuevo edificio, anexo al polideportivo universitario y al Parque de La Ribera, que se destinará a usos deportivos y culturales.
Así se prevé en un convenio entre ambas instituciones, que se firmará en breve, y cuyo contenido fue avanzado hoy el alcalde de Logroño, Julio Revuelta, y el rector de la UR, José María Martínez de Pisón, "dentro de la coincidencia que tenemos en cuanto a las virtudes del campus y la necesidad de resaltar su emplazamiento", según dijo el primer edil logroñés.
Revuelta indicó que "el campus logroñés cuenta con una posición privilegiada, en contacto con la ciudad, que hay que potenciar, pero también hay que darle un carácter propio y unitario, que ahora no tiene". Para ello, se piensa en contar con nuevas conexiones peatonales y rodadas "para unir las zonas norte y sur del campus".
En este sentido, detalló que, como actuaciones concretas en este campo, y siempre a la espera del proyecto definitivo, se piensa en peatonalizar la calla Cigüeña, "que ahora separa edificios y que, con un nuevo tratamiento, puede configurar un espacio universitario de gran valor".
Además, en la calle Piscina, paralela a la tapia del Complejo Deportivo Cantabria, "donde se encuentra ahora el edificio del Centro Los Angeles, se dejará libre la calle, para que se puedan conectar, salvando la calle Madre de Dios, las zonas norte y sur del campus".
Con ello se logrará, según Revuelta, "ese carácter unitario y con personalidad que distingue a los campus de otras universidades, pero contando también con que es una zona de paso habitual de la ciudad". Las zonas de dominio público se ejecutarán por parte del Ayuntamiento, mientras que las parcelas privadas correran a cargo de la UR.
Además, el alcalde adelantó la construcción del nuevo edificio, anexo al Polideportivo de la UR, y en el Parque de La Ribera, "atendiendo a una petición del Consejo de Estudiantes", y para el que se prevén usos deportivos, de ocio y culturales, como una sala de conciertos. Será construido por el Consistorio, pero, posteriormente, será la UR la encargada de su gestión.
Revuelta indicó que, para la realización del proyecto, se convocará una asistencia técnica y un concurso de ideas, para el que calculó un plazo de 8 a 10 meses, "de tal modo que, antes del final del presente mandato, las obras puedan estar en marcha, para garantizar también su ejecución en el futuro".
Por su parte, Martínez de Pisón subrayó la necesidad de "dar personalidad al campus, redefiniendo sus manzanas y cerrando un círculo; se va a dar un cambio cualitativo en la idiosincrasia de la UR".
En esta línea, apuntó la urbanización nueva de sus espacios entre edificios, "como los que hay ahora entre el Vives, el Quintiliano y la Biblioteca; con la apertura de la calle Piscina, para unas comunicaciones más ágiles y dinámicas; o la construcción del nuevo edificio, que contribuirá a embellecer la zona".