El edificio de San Bartolomé 15, del siglo XVI, albergará en unos 18 meses un restaurante de tres plantas

Actualizado: viernes, 28 julio 2006 16:12

LOGROÑO, 28 Jul. (EUROPA PRESS) -

El edificio situado en el número 15 de la calle San Bartolomé, en la esquina con la calle Herrerías, erigido en el siglo XVI, albergará en un plazo estimado de unos 18 meses un bar-restaurante que se distribuirá entre las tres plantas del inmueble, en el que se respetará su carácter original.

El concejal del Plan Especial para el Casco Antiguo, Conrado Escobar, presentó hoy el proyecto, junto con el arqueólogo encargado de los trabajos previos, Pedro Alvarez Clavijo, y el arquitecto redactor, José Antonio Fernández.

"Es un edificio de indudable valor histórico y artístico, en el que se ha elegido el uso de la restauración como el más acorde con sus dimensiones y el más respetuoso con su interior. Es un enclave de gran valor, en el que se reúnen todos los objetivos de calidad y de que todos los logroñeses lo puedan aprovechar", dijo el edil.

Alvarez Clavijo explicó que el edificio, si bien tiene su origen en el siglo XVI, cuenta con elementos de varias épocas "en los que tenemos que ir entrando como en las capas de una cebolla". Así, señaló que se conserva la fachada de piedra de sillería en la calle Herrerías, que era la entrada original al inmueble, con un gran portal en el que podría haber un escudo pintado.

A ello sumó que, en el interior, una vez eliminados los falsos techos de escayola, ha aparecido la estructura original de madera "en bastante buen estado" y que se pretende conservar, lo mismo que algunos elementos de la decoración interior.

Por su parte, José Antonio Fernández detalló que el proyecto arquitectónico "pretende respetar al máximo los valores del edificio". En este sentido, especificó que se recuperará la entrada original en la calle Herrerías, con un arco de medio punto "y el escudo, si aparece una vez hechos los trabajos".

Se recuperará, igualmente, una galería que da a la calle Herrerías "y algunos otros huecos ocultos, intentando mantener la imagen habitual del edificio". Se eliminará, por contra, una parte de la acutal entreplanta, construida en el siglo pasado para variar el uso del edificio para viviendas.

Una vez realizada la remodelación, la planta baja se utilizará como bar-cafetería; en la entreplanta que quede se instalarán las cocinas; y las plantas restantes, serán las ocupadas por los salones-comedor, además de diversos servicios, entre los que estará un ascensor "para hacer accesible el local a las personas con discapacidad".

En conjunto, se prevé una inversión inicial de 700.000 euros -500.000 en la ejecución material de las obras y 200.000 en el equipamiento inicial-, para unos trabajos que ya se han iniciado en su fase previa, de desmontaje y de estudio, y que, de acuerdo con la previsión manejada por Escobar, estarán finalizados "en unos 18 meses".