LOGROÑO, 15 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio Fiscal pide tres años y nueves meses de prisión a una persona acusada de alzamiento de bienes y de abandono de familia, ya que se negó a abonar la pensión alimenticia de sus hijos y vendió sus empresas a precio "muy inferiores" a los reales para que no se pudiera "dirigir traba contra bien alguno a su nombre".
Está previsto que el juicio contra este acusado se celebre el próximo día 19 de enero en el Juzgado de lo Penal número 2 de Logroño.
Según relata el escrito de acusación, A.B.O., sin antecedentes penales, contrajo matrimonio el 29 de julio de 1984, del que nacieron tres hijos, todos a día de hoy menores de edad. Posteriormente se separó de su esposa en el año 2000, conviniendo de mutuo acuerdo que éste abonara en concepto de alimentos a sus hijos de 1.200 euros (200.000 pesetas).
Cuando la pareja obtuvo el divorcio el 12 de marzo del 2003, según la misma fuente, se fijó de mutuo acuerdo en el convenio regulador el pago 1.235 euros mensuales en en concepto de alimentos a sus hijos. No obstante el 23 de julio de 2003, el acusado remitió un burofax a la madre de sus hijos en el que le ponía en conocimiento que "iba a dejar de abonar la prestación de alimentos por manifestar no poder hacerlos efectivos". Desde entonces no ha vuelto a abonar cuantía alguna para el alimento de sus hijos.
Según el relato de la acusación, A.B.O. disponía de una "muy saneada economía", desarrollando una importante actividad en el sector inmobiliario disponiendo de más de veinte oficinas en varios puntos de España dedicadas a la gestión de compra y venta de inmuebles, así como a la promoción inmobiliaria con varias mercantiles.
Todas ellas, prosigue el relato, se encontraban en "perfecto funcionamiento" y de las que era socio fundador, bien administrador único. Según el escrito durante el mes de junio del 2003 fue enajenando todas por precios "muy inferiores a los reales" de forma que, pese a mantener el mismo estatus económico y nivel de ingresos y gastos que con anterioridad, "no es posible dirigir traba contra bien alguno a su nombre", haciendo infructuoso el crédito de sus hijos.
Para el fiscal, los hechos narrados constituyen un delito de alzamiento de bienes y otro de abandono de familia. Considera al acusado, L.K. responsable en concepto de autor de los delitos.
En su opinión, procede imponer al acusado por el delito de alzamiento de bienes una pena de tres años de prisión, mientras que por el de abandono de familia solicita nueve meses de prisión. Además reclama una indemnización a su ex-esposa en la cantidad devengada y no abonada desde julio del 2003.
