LOGROÑO, 25 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de La Rioja ha aprobado el Decreto que desarrolla el reglamento por el que se regula la calificación de artesano o empresa artesana y el Registro General de Artesanía de La Rioja, según informó hoy el consejero de Agricultura y Desarrollo Económico, Javier Erro, quien estuvo acompañado del portavoz del Gobierno regional, Emilio del Río.
Una norma que dijo que "establece el procedimiento y los requisitos para la obtención de la calificación artesanal que permitirá a su titular, ya sea artesano o empresa artesana, el acceso al Registro de Artesanía y su reconocimiento como tal".
El texto se ordena en tres capítulos: el primero establece el concepto, contenido y estructura del repertorio de oficios y actividades, como instrumento básico que expresa la relación de aquellos oficios y actividades que en cada momento deben ser reconocidos como tales.
Así, el repertorio se estructura en cuatro grupos de clasificación: Artesanía Artística o de Creación; Artesanía de Bienes de Consumo; Artesanía de Servicios; y Artesanía Tradicional o Popular de La Rioja. Dentro del Grupo de Artesanía de Bienes de Consumo, se constituye el subgrupo de Artesanía Agroalimentaria.
El Capítulo II regula el procedimiento y requisitos para la obtención del reconocimiento oficial de la condición de artesano o empresa artesana, lo que se acredita mediante la posesión del documento de calificación artesanal. En el caso del subgrupo de Artesanía Agroalimentaria, se establece que será posible el empleo de maquinaria en el proceso de elaboración, cuando sea debido a las actuales exigencias higiénico-sanitarias y no persiga un aumento de la producción.
Dentro de este capítulo, se reconoce y regula la figura del Artesano Honorario, que es aquel que, sin desarrollar una actividad económica, viene ejerciendo la artesanía con reconocido prestigio hasta el punto de obtener el reconocimiento oficial.
Este reconocimiento está motivado por la conveniencia de preservar oficios en vías de extinción, que forman parte del patrimonio socio-cultural y cuyas técnicas podrían ser transmitidas, mediante la realización de los correspondientes cursos de formación y práctica, a las personas que estuvieran en el ánimo y disposición de manejarlas.
El Capítulo III establece la ordenación y el funcionamiento del Registro General de Artesanía y la inscripción del Artesano y de la Empresa Artesana.
Además, el Decreto contempla el Registro General de Artesanía que "permitirá la elaboración y actualización de un censo de artesanía en La Rioja"; "contribuirá a la definición de las políticas de ayudas públicas al sector artesano promoviendo su desarrollo"; "facilitará" el ejercicio de las funciones de control y tutela de los intereses públicos en el ámbito de la actividad artesanal; y "habilitará" a los inscritos en el mismo para usar la denominación de 'empresa artesana' o 'artesano', haciendo uso de los distintivos que puedan establecerse y acceder a las medidas de fomento que se puedan promover.
Erro indicó que, en el Decreto, se incluye la prohibición de ejercer determinadas actuaciones como la utilización de la denominación 'empresa artesana', 'artesano', 'producto artesano' o denominaciones similares, tanto por los productores como por los distribuidores o vendedores sin la previa obtención del documento de calificación que acredite el carácter artesano del productor y del producto y su inscripción en el Registro General de Artesanía.
Además precisó que, cuando se pongan a la venta productos tanto artesanos como no artesanos, deberán estar "perfectamente separados".
El titular de Agricultura señaló que actualmente hay censados unos 365 artesanos o empresas artesanas, si bien calcula que se registrarán unos 200. Explicó que es una actividad que se concentra en un 35 por ciento en Logroño, un 10 por ciento en Calahorra, mientras que el 55 por ciento restante se reparte por toda la región.
Erro indicó que el 24 por ciento de estas personas se dedican a la artesanía artística o de creación, un 15 por ciento a la de bienes de consumo, un 51 por ciento a la artesanía tradicional o popular, y un 8,6 por ciento a la artesanía de servicios. Apuntó también que el 64 por ciento de los artesanos son hombres y el 36 por ciento mujeres.
Además, señaló que 20 por ciento "se han iniciado en la actividad artesanal en la última década", al tiempo que resaltó que el 88 por ciento "desde que se inició ha mantenido esta actividad". Apuntó que el 62,1 por ciento trabaja sólo, mientras que el 39 por ciento restante cuenta con 3 o más empleados.
Por ingresos, resaltó que el 34 por ciento tiene ingresos inferiores a los 6.000 euros anuales, con lo que compagina esta actividad con otro trabajo; otro 32 por ciento se sitúa entre los 12.000 y 24.000 euros; y un 24 por ciento por encima de los 24.000 euros.
