LOGROÑO 18 Ene. (EUROPA PRESS) -
El consejero de Hacienda y Empleo, Juan José Muñoz, anunció hoy la creción de un Registro de Empresas de Inserción Laboral que servirá para "fomentar y mejorar las posibilidades de contratación de las personas en riesgo de exclusión sociolaboral" y "facilitar su acceso a un empleo de calidad".
Explicó que las Empresas de Inserción son aquellas iniciativas que combinan la "lógica empresarial con metodologías que hacen posible la inclusión de personas en los procesos de inserción laboral en la propia empresa, para pasar posteriormente a una empresa ajena o a proyectos de autoempleo".
De este modo, el objeto social de las empresas de inserción es la integración sociolaboral de personas en situación o grave riesgo de exclusión social, que quedan excluidas de los circuitos tradicionales del empleo. Muñoz indicó que este tipo de personas suelen ser "ex-drogadictos, ex-presidiarios o gente procedente del fracaso escolar"
Este tipo de empresas proporcionan un trabajo remunerado, formación y el acompañamiento que necesita este colectivo para mejorar sus condiciones de sociales y laborales, y conseguir, finalmente, su acceso al mercado laboral ordinario. Pioneros, Labor, El trastero y Cáritas-Chavicar, son algunas que en La Rioja desarrollan estos trabajos, según indicó Muñoz.
El consejero de Hacienda y Empleo afirmó que el registro "facilitará el desarrollo y certificación de estas empresas, proporcionando la calificación de empresa de inserción, calificación que actuará como garantía para acceder a los programas de ayudas y subvenciones que se establecerán por parte del Gobierno de La Rioja".
Para conseguir la calificación de 'inserción socio laboral', las empresas deberán cumplir, entre otros, con los siguientes requisitos como tener el domicilio social en la Comunidad Autónoma de La Rioja y desarrollar su actividad en territorio riojano; tener como objeto social de la empresa la integración sociolaboral de las personas de exclusión social; o proporcionar medidas personalizadas de apoyo, como formación dirigida al aprendizaje de una actividad, o la adecuación del nivel formativo a las exigencias del mercado laboral.
Pero, además, este tipo de empresas llevarán a cabo un acompañamiento social, encaminado a satisfacer o resolver problemáticas personales y de convivencia que impidan o dificulten el proceso de adaptación laboral, y establecerán pautas de funcionamiento destinadas a la adquisición de hábitos sociales y de trabajo.
Por último, los excedentes obtenidos en cada ejercicio revertirán en beneficio de la empresa, mediante la mejora o ampliación de sus estructuras productivas o la promoción de actividades relacionadas con la inserción sociolaboral, sin que se pueda producir un reparto de beneficios.