LOGROÑO 27 Mar. (EUROPA PRESS) -
La elaboración del vino con virutas de roble "nada tiene que ver con el concepto de crianza, reserva y gran reserva". Hay que distinguir entre "virutas de roble y crianza o envejecimiento" dijo, esta mañana, la Investigadora del Servicio de Investigación y Desarrollo Tecnológico (CIDA), Juana Martínez, en la presentación de su libro 'Incidencia del origen del roble en la crianza de los vinos de Rioja'.
Aseguró que se trata de un "tema delicado" porque "cuando hablamos de virutas de roble no podemos hablar nunca de crianza o envejecimiento". Los procesos son "distintos" y "no se puede asimilar al término crianza a esta técnica porque su objetivo es diferente y el tipo de vino es distinto".
La elaboración de vino con virutas de roble "no es una práctica negativa" pero "es diferente que el concepto de crianza, reserva y gran reserva".
Distinguió entre la elaboración del vino con virutas que "persigue la aromatización del vino con los componentes que cede la madera del roble" en "uno, dos o tres meses" y el "proceso lento" de crianza en barrica "donde hay una evolución aromática y de otros componentes que se traducen en un equilibrio en el vino que difícilmente se puede conseguir en el periodo corto de tiempo" que necesita la primera técnica.
La investigadora insistió en que la cuestión principal es que "se establezca una normativa legislativa para identificar cada producto en su etiqueta y que no se cree confusión".