El nuevo aparcamiento subterráneo de Cascajos estará en dos meses y se podrán solicitar plazas tras el verano

Actualizado: martes, 23 mayo 2006 16:35

LOGROÑO, 23 May. (EUROPA PRESS) -

El nuevo aparcamiento subterráneo que se construye en la calle Marqués de Larios, en el barrio logroñés de Cascajos, estará finalizado en dos meses, por lo que las 385 plazas con las que cuenta se van a poder solicitar tras el verano.

Así lo adelantó hoy el alcalde de Logroño, Julio Revuelta, quien, acompañado por los concejales de Desarrollo Urbano, José Musitu, y de Vialidad, Alberto Guillén, visitó este mediodía las obras del estacionamiento "que sorprende ver tan avanzado".

Para el primer edil logroñés, "como las obras para este aparcamiento no han producido molestias, pasa más desapercibido", al tiempo que recordó que "en este caso, se aprovechó una buena oportunidad para firmar un convenio urbanístico, conjunto a la construcción de viviendas" en el solar de las antiguas bodegas Campo Viejo.

Revuelta señaló que "se trata de 385 nuevas plazas que estarán en unos dos meses", por lo que indicó que "estamos estudiando que, tras el verano, se abran las listas de solicitudes para los vecinos", con las mismas características que las de otros aparcamientos, si bien dijo que "en muchos casos, será una segunda plaza, porque las viviendas de la zona ya cuentan con garajes".

Por el momento, el precio de las plazas está por determinar "al no estar las obras entregadas, pero, en todo caso, será un precio muy competitivo". El alcalde apuntó, además, que "es un aparcamiento que tiene visión de futuro", por su cercanía al PERI Ferrocarril "que en un tiempo esperemos corto, va a tener más tráfico".

El aparcamiento se ubica en la calle Marqués de Larios, en el tramo comprendido entre las calles Gustavo Adolfo Bécquer y Juan Boscán. Cuenta con dos plantas, con 385 plazas -184 en el primer piso y 201 en el segundo-, con una superficie total de 9.929,83 metros cuadrados.

El presupuesto de la obra es de 3,6 millones de euros, de acuerdo con un proyecto de los arquitectos Javier Maya y Estela Arteche, que ha ejecutado la empresa Soto del Pilar, entidad promotora de la urbanización y edificación del ámbito de Campo Viejo.

Los accesos rodados se sitúan en la propia calle Marqués de Larios, entrando desde Gustavo Adolfo Bécquer hacia Juan Boscán y saliendo en el mismo sentido, al final de la calle. Los accesos peatonales se distribuyen en cuatro núcleos de escaleras: dos, junto a estas mismas calles, y otros dos junto a los pasos peatonales entre parcelas.