El PR critica la "devaluación" de los órganos municipales de debate y pide que en el pleno "prevalezcan" las ideas

LOGROÑO 23 Feb. (EUROPA PRESS) -

El portavoz del grupo municipal del PR, Angel Varea, criticó hoy la "devaluación" que, a su juicio, se está dando en los órganos de debate del Ayuntamiento por la actuación del equipo de Gobierno, frente a lo que reclamó que, en el caso concreto del pleno municipal, "prevalezcan" las ideas "sobre el cronómetro".

Varea partió para sus apreciaciones de "que los grupos de la oposición, en concreto, el PR, presentamos proposiciones que se rechazan en el pleno, pero que, luego, acto seguido, se van llevando a cabo por parte del equipo de Gobierno".

En este sentido, citó iniciativas regionalistas sobre temas como el carril bici, las antenas de telefonía móvil, el aparcamiento de camiones o la peligrosidad de la carretera ante el Polígono de Cantabria. La "gota que ha colmado el vaso", con todo, ha sido el caso del circuito del Monte Corvo.

Así, el portavoz del PR recordó que su grupo presentó una moción en el último pleno ordinario, celebrado el 2 de febrero, para agilizar los trámites para la apertura del circuito -clausurado por falta de licencia- "que se rechazó". De ahí, dijo, su "sopresa" al comprobar que el pasado día 12 esos trámites "se agilizaban como pedíamos".

Este tipo de actuaciones, en sus palabras, "dañan la credibilidad de las instituciones" que, según dijo, "están tomando un rumbo muy peligroso", una situación de la que culpó al presidente del pleno, Angel Rituerto, y a la Junta de Portavoces, "en la que los representantes del PP podían rechazar ya las propuestas diciendo que se está trabajando en ellas".

"Con estas actuaciones, los ciudadanos pierden la confianza en las instituciones, es necesaria más credibilidad. Los ciudadanos no son necesarios sólo para votar cada 4 años, sino que tienen que ver que el pleno es un lugar donde se les representa, donde se confrontan las ideas", afirmó Varea.

Criticó especialmente a Rituerto, "que se ha convertido sólo en un cronometrador, midiendo los segundos hasta casi el ridículo, mientras que no hace lo que realmente tiene que hacer, que es ordenar las sesiones", algo que, en su opinión, quedó especialmente patente en el último pleno del año 2005, "cuando se expulsó a mi compañero Miguel Gómez Ijalba, mientras que Rituerto fue incapaz de poner al alcalde en su sitio".

Denunció que "se está trasladando al Ayuntamiento una actitud calcada a lo que pasa en otras instituciones, como el Parlamento" y señaló que "aprovechamos una fecha como la de hoy, 23-F, un día significativo para la democracia, para poner de manifiesto nuestra queja y nuestra petición de que se corrija esta actitud".

El portavoz regionalista apuntó que "lo importante no son los reglamentos aprobados por el Ayuntamiento, sino el espíritu de esos reglamentos, que consagran al pleno municipal en un órgano de debate político para confrontar ideas y en el que deben prevalecer las opiniones, y no la mayoría absoluta de un partido".