MADRID, 20 May. (EUROPA PRESS) -
El director de la Fundación Universitaria San Pablo CEU, José Luis Guillén, ha explicado que están evaluando la posibilidad de ofertar grados de 3 años pero que, en todo caso, no se implantarían hasta el curso 2016-2017, después de que el Gobierno aprobase el Decreto 3+2, que habilita a las universidades a impartir grados de tres años de duración y másteres de dos, a partir del próximo curso.
Durante un desayuno informativo para presentar el plan de actuación de la institución, que abarca tanto a universidades como a colegios privados y concertados y FP, Guillén ha precisado que "no hay que precipitarse" y, aunque se hable de que a nivel internacional se manejan las titulaciones de tres años, hay que analizar cómo va a reconocer la sociedad esta posibilidad y establecer también una oferta de posgrado que esté suficientemente desarrollada. "Hay que preservar la calidad", ha puntualizado.
Del mismo modo, ha explicado que, tras la aprobación de la Ley Orgánica de Calidad de la Educación (LOMCE), la institución prevé implantar sus propias pruebas de acceso a partir del próximo curso o del siguiente.
Por otro lado, Guillén ha desgranado las claves del plan de actuación, que se aplicará a tres o cuatro años, y que se basa en varios ejes fundamentales: la atención a la persona para contar con un profesorado de calidad y motivado; la empleabilidad e internacionalización de la educación; la conexión de la institución con la sociedad a través de actividades como el voluntariado, el emprendimiento o la investigación aplicada al mundo real; y la potenciación de la eficiencia y la sostenibilidad económica.
IMPACTO DE LA CRISIS Y OBJETIVOS FUTUROS
En este sentido, ha puntualizado que, pese a contar con una situación financiera "razonable y buena", la crisis económica ha afectado a la institución como "a todo el mundo" y ha hecho referencia a las dificultades de algunas familias para hacer frente a los pagos.
Así, tras recordar que el CEU alberga entre todos sus centros a unos 30.000 alumnos, ha indicado que el porcentaje de los que habrían tenido dificultades no es superior al 5 por ciento y que, en todo caso, cuentan con una política de becas y ayudas de unos 8 o 9 millones de euros, gracias a las cuales nadie que esté en esta situación tiene que abandonar sus estudios.
En cuanto al impacto del alumnado durante la recesión económica, ha comentado que en los colegios privados se ha experimentado una caída de entre un 15 y un 20 por ciento, en línea con el sector, mientras que en los concertados no se ha notado. En las universidades, han descendido las matrículas un 4 o 5 por ciento. "Ahora hemos notado que se ha tocado suelo en la admisión y las perspectivas que tenemos son buenas", ha añadido.
Respecto a los objetivos que persigue la Fundación con este plan, ha destacado que no hay interés por crecer en el alumnado universitario, aunque sí ligeramente en los centros escolares y en la Formación Profesional, al igual que en el posgrado, donde esperan aumentar entre un 3 y un 5 por ciento.
En cuanto a la internacionalización, Guillén ha fijado un objetivo de crecimiento anual entre el 10 y el 15 por ciento de alumnos internacionales que estudien todo el grado en España.
