Publicado 04/11/2014 16:05

La Asociación contra el Acoso Escolar aplaude el primer caso de reconocimiento de discapacidad por bullying

MADRID, 4 Nov. (EUROPA PRESS) -

La presidenta de la Asociación contra el Acoso Escolar (ACAE), Encarna García, ha manifestado su satisfacción después de que los Servicios Sociales de Castilla y León hayan reconocido el primer caso de discapacidad del 33 por ciento a un menor debido al estrés postraumático que sufre desde que, a los 10 años, sufriera acoso escolar en forma de agresiones físicas y vejaciones por parte de sus compañeros en un colegio de la Comunidad de Madrid.

Tal como adelantó 'El Mundo' este lunes y según ha explicado a Europa Press la presidenta de la Asociación Contra El Acoso Escolar (ACAE), Encarna García, el chico "llegaba con palizas diarias, marcas en el cuerpo y con sus partes rojas, por lo que había habido algo más que tocamientos". Incluso "una vez llegó a volver del colegio con el tímpano roto".

Además, ante la insistencia de la madre del niño para poner fin a las agresiones, "la escuela intentó hacerla sentir culpable de los ataques y las agresiones y la denunciaron por llamarles fascistas en un blog". "El resultado fue que condenaron a la madre, en lugar de al colegio --ha criticado García-- cuando lo lógico sería que indagaran por qué dijo lo que dijo". "Así está la justicia española", ha lamentado.

Como resultado de las agresiones y de la imposibilidad de ponerles fin, la familia dejó el colegio y la Comunidad de Madrid y se mudó a Castilla y León.

En la actualidad, el menor, de 15 años, "toma cuatro pastillas diarias que muchos adultos no resistirían" para combatir los ataques de ansiedad y el estrés postraumático que le ha quedado como secuela del acoso que sufrió hace ya un lustro. Además, el aislamiento social, las vejaciones y los insultos "también dejan secuelas", ha recordado la presidenta de ACAE.

García ha explicado que el reconocimiento de la gravedad de las secuelas este caso por parte de los médicos y los servicios sociales "significa muchísimo para tantos niños y niñas" en España que "han visto tantas puertas cerradas".

Además ha hecho un llamamiento, en primer lugar, a las escuelas para que "dejen de hacer oídos sordos y mirar para otro lado" cuando se producen agresiones y acoso escolar en sus centros, para que vigilen los recreos y, especialmente, para que haya "mayor celeridad" en los procedimientos para atajar estos casos.

"Si se quiere se puede solucionar el problema en un solo día", ha asegurado García, que ha puesto como ejemplo al instituto Jovellanos de Gijón y al instituto Maimónides de Córdoba.

"El Reglamento de Régimen Interior permite expulsar a un alumno del centro pero el protocolo de muchos colegios lo demora hasta dos meses, por lo que no sirve para nada y acaba haciendo que el acosado se vaya del centro", ha lamentado.

Además, ha urgido a los médicos y a las autoridades judiciales a que se impliquen en los casos de agresiones a menores en los centros "en lugar de pasar de puntillas" por ellos y ha animado a los padres a denunciar y a iniciar un procedimiento a la primera noticia de acoso a sus hijos. "Muchas veces los padres tardan hasta tres años en darse cuenta de que sus hijos están sufriendo agresiones", ha indicado.

Además, les ha recomendado buscar ayuda y que sus hijos "sepan que ellos (sus padres) les van a ayudar". "Yo le digo a las madres que lloren conmigo, que he pasado por lo mismo que ellas, pero que no lloren delante de sus hijos, que sean fuertes", ha explicado.

García se ha ofrecido a ayudar a los padres que necesiten orientación, apoyo o consejo ante casos de acoso escolar y ha indicado que, pese a estar en el Consejo de la juventud de Gijón, ha contribuido ya a atender casos en otras regiones como Córdoba o, en esta ocasión, Castilla y León.