Archivo - Fachada de la sede de la Audiencia Provincial de Madrid, a 26 de septiembre de 2025, en Madrid (España). - Eduardo Parra - Europa Press - Archivo
MADRID 18 Nov. (EUROPA PRESS) - Un acusado de matar en mayo de 2023 a un amigo en un bar de Carabanchel alega en el juicio que actuó en defensa propia en el transcurso de una pelea frente a la paliza que le estaba propinando la víctima y bajo la influencia del alcohol y las drogas.
El juicio ha arrancado esta mañana en la Audiencia Provincial de Madrid con los informes previos. El procesado declarará al final de la vista oral.
En su informe previo, la fiscal ha expuesto que el acusado actuó con intención de matar, apoyándose en las grabaciones de las cámaras del bar y de un bazar cercano. Solicita una pena de doce años de prisión por homicidio, además de diez años de libertad vigilada.
Por su parte, la defensa rechaza la existencia de intención homicida y argumenta que su cliente actuó en legítima defensa, alegando que tenía un miedo insuperable a la víctima, que presuntamente le habría propinado una paliza previa.
El letrado sostiene que el acusado no quería matar, que no existió ánimo homicida y que, en todo caso, se trataría como máximo de un homicidio imprudente. Asimismo, ha planteado la existencia de una posible eximente por drogadicción, que habría afectado a la capacidad de su cliente para actuar de manera racional.
Al inicio de la vista, el acusado ha solicitado cambiar de abogado justo después de constituirse el jurado, lo que el tribunal ha considerado un intento de retrasar el juicio. Tras ello, el presidente le ha advertido que "no puede dilatarse más el proceso" y que el letrado actual ejerce "dignamente" la defensa, mientras su letrado ha protestado a efectos de nulidad.
Según el escrito de acusación, el primero de los procesados mantuvo una discusión en la terraza del bar 'El Rinconcito' con la víctima, O. P. B.. La discusión derivó en una pelea con intercambios de golpes. La víctima se dirigió entonces al portal donde residía un familiar, en la misma calle, y fue seguido por el acusado, que continuó increpándolo.
En el descansillo de la escalera, ambos cayeron al suelo. La Fiscalía sostiene que, en ese momento, M. R. G. presuntamente le asestó varias puñaladas en el costado izquierdo con intención de acabar con su vida, o aceptando esa posibilidad. Ambos volvieron a caer al suelo posteriormente en plena vía pública, tras lo cual el acusado se marchó del lugar.
La víctima logró llegar al portal de un familiar para pedir ayuda, pero se desplomó y murió instantes después. El avance de autopsia indica que el fallecimiento se produjo por un hemoneumotórax con shock hipovolémico provocado por una herida de arma blanca.
El Ministerio Fiscal también acusa a J. G. R., nacido en 1995, que habría presenciado la pelea. Según la acusación, tras los hechos pidió la navaja al presunto autor con intención de limpiarla, solicitó papel en un comercio cercano y, posteriormente, el arma fue recogida de nuevo por el primer acusado. Ambos abandonaron el lugar sin informar a la Policía.