La víctima declara que nunca le dejó salir sola de casa
MADRID, 19 Ene. (EUROPA PRESS) -
Un acusado de múltiples delitos de malos tratos ha admitido este lunes en el juicio que "lamentablemente" en una ocasión golpeó a su expareja con "la mano abierta" en el transcurso de una fuerte discusión, negando que la amenazara con matarla y con cortarla en "cachitos para luego tirarla por la cuneta".
Así lo ha manifestado Román G.P., quien se ha sentado en el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial de Madrid por delitos de violencia doméstica habitual, malos tratos, amenazas, coacciones y agresión sexual. Se enfrenta a una petición fiscal de 18 años de cárcel.
El procesado, que cumple prisión preventiva, ha relatado al tribunal que mantuvo una relación con la víctima que apenas duró dos meses. Desde el inicio, vivieron bajo el mismo techo con peleas verbales en las que él llegaba a romper muebles del domicilio con motivo del consumo a diario de sustancias estupefacientes, sobre todo cocaína.
Tras reconocer que en ocasiones empleaba "un lenguaje soez" hacía la mujer, éste ha manifestado que las lesiones que podía presentar la mujer se enmarcaban en los "juegos amorosos" que mantenían con apretones y mordiscos consentidos.
La fiscal le ha preguntado sobre la pelea que propició que la mujer saliera corriendo de la casa para buscar ayuda policial. Según su versión, el enfrentamiento arrancó cuando él le manifestó su intención de dejarlo, algo con lo que ella no reaccionó bien. "La agarré y lamentablemente la golpeé con la mano abierta. No tenía intención de hacerla daño", ha dicho el hombre, negando que mantuviera a la chica encerrada en el domicilio sin comer ni beber.
Renunciando al biombo, la chica ha mantenido una versión que distaba de la de su presunto agresor. Así, ha relatado que desde el inicio el acusado la trató de someter y mantuvo con una auténtica "guerra psicológica" donde él "tenía el poder".
"No me dejaba salir sola. Siempre tenía que salir con él. Me llevaba al centro comercial donde trabaja mi expareja y se pasaba horas mirándole. Me bloqueaba. Me rompía el móvil y la ropa, ha contado.
Además, la mujer ha contado que en una ocasión éste la clavó en la espalda un cuchillo y no le dejó ir al médico. En otra de las pelas le apuntó en la cabeza con la pistola y la propinó varias patadas en el cuerpo y la cabeza.
HECHOS JUZGADOS
Según el fiscal, el procesado mantuvo una relación sentimental con la víctima durante tres meses. Desde el inicio de la relación, el acusado sometió a su entonces pareja a continuas vejaciones e insultos, dirigiéndole numerosas expresiones despectivas.
En este contexto, el hombre le clavó un cuchillo el 10 de febrero de 2014, que le causó una herida grave. En otro episodio violento, el acusado la agredió en la cara, ocasionándola hematomas, y en otro ocasión le propinó una paliza con "múltiples puñetazos en la cabeza" hasta conseguir que se desmayara.
Antes de quedar inconsciente, la mujer pudo escuchar como su agresor le decía: "Vas a amanecer en cachitos, te voy a picar, montar en coche y te voy a tirar a la cuneta".
