Aguirre asiste a la despedida de Álvarez tras afirmar ayer que como ministra ha sido un "castigo" para los madrileños

Actualizado: miércoles, 8 abril 2009 16:01

MADRID, 8 Abr. (EUROPA PRESS) -

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, asistió hoy a la toma de posesión del nuevo ministro de Fomento, José Blanco, y a la despedida de su antecesora en el cargo, Magdalena Álvarez, con la que ha mantenido una serie de desencuentros en el tiempo en el que ha estado al frente de la cartera.

Blanco se puso en contacto ayer con todos los presidentes de las comunidades autónomas para invitarles a su toma de posesión, y de todos ellos, decidieron finalmente acudir el de Cantabria, Miguel Ángel Revilla; el de Aragón, Marcelino Iglesias; el de Baleares, Francesc Antich, y la propia presidenta madrileña.

Aguirre fue la última de los dirigentes autonómicos en llegar hasta la sala donde Blanco tomó posesión y dio la bienvenida a todo su nuevo equipo media hora más tarde de lo previsto, ya que hubo que esperar a la vicepresidente primera del Gobierno central, María Teresa Fernández de la Vega, que venía de las tomas de posesiones del resto de ministros.

La presencia de Aguirre no pasó desapercibida, más teniendo en cuenta que la toma de posesión de Blanco era también la despedida de Álvarez, con la que la presidenta madrileña ha tenido constantes desencuentros. Precisamente ayer, la jefa del Ejecutivo madrileño afirmó que Álvarez había sido "un castigo constante para los madrileños" porque había sometido a la Comunidad de Madrid a "la asfixia".

A pesar de que hoy fue la última cita en la que ambas mujeres se verán en calidad de presidenta autonómica y ministra, Aguirre volvió a arremeter contra Álvarez pero recalcó que había acudido al acto porque Blanco la había invitado y le ha parecido, por su parte, "una muestra de buena voluntad". "Quiero manifestar los mejores deseos al ministro de Fomento", señaló.

Tras destacar que no tiene nada contra Álvarez "en lo personal", la dirigente autonómica indicó que "desde el punto de vista de los madrileños, ha habido cero euros en obra pública nueva", al tiempo que le recriminó que haya tardado seis años en acabar una estación de Cercanías en un sitio tan emblemático como es la Puerta del Sol, mientras que el Gobierno regional ha realizado en tres años más de 90 kilómetros de Metro. "Esto demuestra un desprecio", agregó.

ATENCIÓN ESPECIAL A MADRID

La jefa del Ejecutivo madrileño indicó que en "un momento de crisis "tan grave" como el que sufre España, "el Ministerio de Fomento requiere desde el punto de vista de Madrid y de los madrileños una atención especial".

Estas palabras se producen después de que Blanco, durante su discurso, se comprometiese a escuchar a todos los presidentes autonómicos para trabajar juntos "respetando las competencias de cada uno".

Fue en este punto cuando la presidenta madrileña volvió a recordar que Madrid "es la locomotora económica de España" y que "ya era hora" de que acabasen estos cinco años (los que ha estado Álvarez al mando de esta cartera), en los que, a su juicio, "ha sido un olvido, una estigmatización de Madrid y una asfixia constante".

No obstante, destacó que está "convencida" de que el nuevo ministro, porque así se lo ha manifestado en una conversación que ya han mantenido, va a estar "atento" a Madrid y a algunas de las infraestructuras que quedan pendientes en la Comunidad, como el Plan de Cercanías "que tantas veces han anunciado y nunca han llevado a cabo" o las obras que la región "necesita", apostilló.

"Creo que como presidenta de la Comunidad de Madrid y en nombre de todos los madrileños es mi obligación acudir a la toma de posesión y desearle todo lo mejor para Madrid y para los madrileños", insistió Aguirre, quien manifestó que espera y confía en que con la llegada de Blanco, la situación cambie porque Madrid necesita "inversiones en infraestructuras y no puede ser la olvidada del Ministerio de Fomento".

POLÉMICAS DECLARACIONES

La relación entre Aguirre y Álvarez empeoró en los días en los que se inauguró la estación de metro de la terminal 4 de Barajas. En aquel entonces, la ya ex ministra acusó a la dirigente regional de "apropiación indebida" tras inaugurar la citada parada que 18 horas antes había sido inaugurada por Álvarez.

En este acto de 2007, la ex ministra afirmó: "En el único sitio que Aguirre podía inaugurar algo era tumbándose en la vía o colgándose de la catenaria, porque es lo único que había hecho y nada más". Asimismo, relató que, cuando fue a ver "lo que ella había preparado para sus loas, Aguirre había puesto candados en la estación de Aena", remachó.

Con posterioridad, Álvarez reconoció que su visita a la T-4 un día antes de ser inaugurada por la presidenta regional había sido "intencionada". "Fui porque la diseñó, la elaboró, la construyó y la pagó Aena, que es un ente dependiente del Ministerio de Fomento y se terminó de pagar en 2006. Y fui intencionadamente con el propósito de dejar bien claro que en su delirium inaugurativo la presidenta de la Comunidad iba a poner una placa y a inaugurar una obra que es del Ministerio de Fomento", sentenció.

Aguirre no se ha olvidado de estas afirmaciones y hoy hizo referencia a ellas tras el comentario de una periodista en el que decía que, con la marcha de Álvarez, ya no se la iba a ver colgada de una catenaria. Así, la presidenta madrileña se limitó a decir que no la llegaron a ver en esa situación. LA AUSTERIDAD "BRILLA POR SU AUSENCIA"

En cuanto a la remodelación del Gobierno, Aguirre aseguró que estos momentos tienen que ser de "esperanza" y les deseó a los nuevos ministros "todo lo mejor", aunque no pudo evitar asegurar que "por desgracia, hay algunos síntomas" que no permiten concebir "lo mejor" como, por ejemplo, "que el Gobierno no solamente no haya reducido el gasto público en cuanto a la Administración sino que lo haya subido".

"Lo que hay es un Ministerio que pasa a ser Vicepresidencia, por lo tanto, la austeridad ha brillado por su ausencia en este nuevo Gobierno", señaló Aguirre, quien subrayó que aunque hoy era el día de desearles lo mejor, en su opinión, "honestamente, la crisis por la que España atraviesa requiere las reformas estructurales" a las que ayer el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, aludió.

Aguirre criticó que ayer Zapatero mencionase dichas reformas y que hoy no se sepa nada pese a que "desde que hace año y medio tenían que haberse empezado a ponerse en marcha como en el resto de los países de nuestro entorno", concluyó.