ALTODO asegura que no existe ilegalidad en el acuerdo alcanzado con la candidatura de Gúmpert

Actualizado: jueves, 20 diciembre 2012 12:29

MADRID, 20 Dic. (EUROPA PRESS) -

La Asociación de Letrados Por un Turno de Oficio Digno (ALTODO) ha emitido este jueves un comunicado para aclarar los términos del acuerdo alcanzado con la candidatura de Sonia Gúmpert para el Decanato del Ilustre Colegio de Abogados de Madrid (ICAM), donde asegura que no existe ninguna ilegalidad en el mismo.

Así, explica que dicho acuerdo "se limita a establecer, para el caso de victoria electoral, un reparto de funciones entre los futuros diputados de la Junta de Gobierno del ICAM para la gestión, que no dirección, que corresponde a la Junta de Gobierno, de los distintos departamentos de dicha institución, como ya viene sucediendo en la actualidad".

A este respecto, considera "absolutamente razonable que de la gestión del Departamento de Turno de Oficio se encarguen aquéllos diputados que, como veteranos letrados adscritos a dicho turno, son perfectamente conocedores del funcionamiento y necesidades de dicho servicio".

ALTODO se comprometió por su parte a aportar a la candidatura de Gúmpert 900 votantes en función del número de asociados y simpatizantes de los que dispone.

Estos son los términos del acuerdo, "sin que exista ilegalidad alguna al respecto", según ALTODO, que destaca la "transparencia" del mismo, que se encuentra colgado en la página web de la asociación.

Por otro lado ALTODO ha acusado a una candidatura de emitir la víspera de las elecciones "de forma masiva" sms y emails con el eslogan 'Todos contra Gúmpert', al tiempo que ha censurado que el cabeza de lista de una candidatura interviniera en una emisora de radio "recomendando el voto a su favor".

Asimismo, asegura que sus simpatizantes recibieron llamadas para captar su voto, y afirma que todo ello está "prohibido por las normas electorales del ICAM, sin que por parte de ésta Candidatura se haya formulado queja alguna ante la Junta Electoral del Colegio".

Aparte, sostiene que "todo cuando se ha dicho contra la candidatura de Sonia Gumpert son informaciones injuriosas, difamatorias o, sencillamente, falsas, pues durante la jornada electoral no fueron denunciadas ante la Junta Electoral, ni ante los presidentes de las mesas y, por tanto, no constaron en las actas".

A este respecto, explica que no fue hasta el final de la jornada, cuando los recuentos arrojaban una mayoría cualificada a favor de esta candidatura, cuando se producen las denuncias, y considera "relevante" que en la resolución adoptada por la Junta Electoral, que suspendió el trámite de proclamación de la Candidatura ganadora, no se nombre específicamente ninguna candidatura.

En cuanto a los incidentes, dice que fueron provocados por "un grupito exaltado de los derrotados", los cuales "toman el derrotero de los incidentes artificiales, para provocar que se anularan las elecciones", cuando toman cuenta de que esta candidatura obtiene una "mayoría de votos aplastante".

Según ALTODO, estos agarraron y empujaron a un voluntario para impedir que abandonara el Palacio de Congresos y Exposiciones, portando dos ordenadores, propiedad de un colaborador de la candidatura, por lo que hubo que requerir la presencia de la Policía Nacional para que, finalmente, pudiera abandonar el edificio, quedando los ordenadores en custodia de la policía, que se los llevó a la Comisaría a la espera de reclamación de su dueño.

"El hecho de que, contra natura, los 'Todos contra Gúmpert' convinieran formular una queja colectiva ante la Junta Electoral no puede tener otro significado que la conducta propia de los malos perdedores", ha afirmado.

ALTODO advierte de que la candidatura de Gúmpert formulará las alegaciones que sean procedentes ante la Junta Electoral y emprenderá las acciones judiciales necesarias en defensa de la conservación del resultado del escrutinio, que proclama como ganadora su candidatura.

Finalmente, hace un llamamiento a las restantes candidaturas para que acepten el resultado y acaten la voluntad de los colegiado, "abandonando todo método o subterfugio tendente a violar dicha voluntad por métodos antidemocráticos".