MADRID, 20 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Fuente el Saz del Jarama seguirá adelante con el Expediente de Regulación de Empleo Temporal (ERE) que afecta a los trabajadores laborales de la plantilla del Consistorio y que supone la primera regulación de empleo en una Administración pública en la Comunidad.
Los empleados públicos de Fuente el Saz de Jarama han ratificado el fin del proceso de negociación del ERE sin acuerdo que afecta a 19 empleados y han afirmado que "continuarán el proceso de movilización".
"Nosotros consideramos que habrá una merma de servicios a los vecinos, eso seguro. Se han tocado distintos departamentos como biblioteca, polideportivo o cultura. Hemos planteado varias soluciones incluso reducir el salario de todos los trabajadores un porcentaje mínimo ya que tras el decretazo a los funcionarios tenemos poco margen. Al final, el trabajador siempre paga", ha dicho la presidenta del comité de empresa, Araceli Moreno, en declaraciones a Europa Press.
Para sanear la deuda del Ayuntamiento, unos 9 millones de euros, que la actual alcaldesa popular achaca a la gestión socialista de la anterior legislatura, la principal medida este año es ahorrar 420.000 euros de salarios, además de poner en marcha el plan de general de urbanismo.
"Se trata de una nefasta gestión de la anterior corporación. En la anterior legislatura, que gobernaban PSOE e IU, se encontraron cuentas con superávit y en cuatro años han dejado nueve millones de euros de deuda entre bancaria y proveedores además de aumentar la plantilla considerablemente", ha afirmado la alcaldesa de Fuente el Saz del Jarama, Mónica García.
Según la alcaldesa, el equipo de gobierno valoró la situación y vio "inevitable" llevar a cabo el ERE ya que, en su opinión, a "cualquier político con responsabilidad" le toca tomar "medidas drásticas e impopulares".
Por su parte, los vecinos Fuente el Saz del Jarama han coincidido en que el número de empleados públicos era excesivo para una población de unos 6.000 habitantes.
De esta forma, el expediente se ha trasladado a la mesa de la Consejería de Empleo de la Comunidad de Madrid, que tendrá que decidir si admite el ERE o finalmente lo rechaza.
