MADRID 29 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid Barajas se ha convertido en la mañana de este martes en el recibidor de los cientos de personas que vieron sus vuelos cancelados o suspendidos por el corte de suministro eléctrico que ha sacudido la Península Ibérica.
Una de las mayores aglomeraciones se ha producido en el espacio de llegadas de la Terminal 4, a la espera de ver salir por la puerta a familiares o amigos. Entre llamadas de teléfono y miradas desconcertadas, poco a poco se han ido produciendo los primeros encuentros.
"Ahora sí", ha exclamado un hombre al ver acercarse a su mujer, que no terminaba de creerse que su marido hubiera podido volar después de todo.
"Yo estaba histérico sin saber si ibas a venir", le comentaba un joven llamado Raúl a su novia, a la que acababa de recibir y quién ya trató sin éxito llegar al aeropuerto este lunes con la esperanza de que se produjera ese reencuentro.
"Ayer, mi intención era llegar hasta aquí pero fue imposible. Una vez se confirmó que ella (su pareja) no iba a volar, intenté volver para casa de la forma que pude, como todos", ha comentado el joven a Europa Press.
La Terminal 4, que en su mayoría acoge vuelos nacionales, ha sido una de las más afectadas debido a la falta de electricidad tanto en destino como en origen. Iberia, única aerolínea que trabaja en esta parte del complejo aeroportuario, ha revelado que tuvo que cancelar 26 vuelos de los 247 programados. Especifican que ninguno de estos fue "de largo radio".
La compañía ha vuelto a ofrecer a todos los clientes la posibilidad de cambiar los vuelos de este martes a cualquier otro día "si así lo prefieren" por "la persistencia de dificultades para llegar a los aeropuertos y los diferentes problemas derivados del apagón".
UN DÍA DE "TOTAL NORMALIDAD"
Aena, como empresa gestora del aeropuerto, ha informado de que el ambiente en este día es de "total normalidad" y que el sistema eléctrico de las instalaciones ya está conectado a la red tradicional, después de depender de generadores propios en la jornada del apagón.
"Durante esta pasada noche los aeropuertos han adaptado sus horarios a las necesidades de los pasajeros reprogramados y no se han producido aglomeraciones significativas en los terminales", ha contado la entidad.
Esta comunicación oficial se respalda en el testimonio de los trabajadores. Una de estas empleadas, que se disponía a administrar un mostrador de facturación esta mañana, ha expresado que la primera jornada después del corte de suministro ya es "un día normal" aunque "alguna cosa pueda haber".