Beteta defiende la reducción de impuestos y destaca que el 80% del presupuesto para 2010 irá a políticas sociales

MADRID, 3 Dic. (EUROPA PRESS) -

El consejero de Economía y Hacienda de la Comunidad de Madrid, Antonio Beteta, defendió hoy contundentemente la política del Gobierno regional de recorte fiscal como solución ante la crisis porque, su juicio, "es mejor bajar los impuestos que subvencionar, porque el dinero está mejor en manos de los ciudadanos" que en el de las administraciones.

Beteta, que presentó hoy ante el Pleno de la Asamblea de Madrid el proyecto de Ley de Presupuestos de la Comunidad de Madrid para 2010, explicó que éste se caracteriza por ser compatible con el equilibrio presupuestario, ahondar en la política de rebajas fiscales impulsada por el Gobierno regional y, sobre todo, incrementar el gasto social como instrumento para hacer frente a la crisis. De hecho, Beteta destacó que "casi el 80 por ciento del Presupuesto está destinado a políticas sociales".

El consejero insistió en que las cuentas regionales para 2010 garantizan los principales servicios sociales de los madrileños, ya que la dotación de área social, que gana casi un punto en el porcentaje total de gasto no financiero, se sitúa en el 79,18 por ciento del total.

De cada cien euros del Presupuesto, 38 se destinan a Sanidad, 28 a Educación, 9 a Transportes y 7 a Familia y Asuntos Sociales. "Es necesario priorizar el gasto social para atender las necesidades de los ciudadanos con servicios públicos de calidad", explicó el consejero de Economía y Hacienda.

Según explicó, para garantizar los servicios sociales, el Gobierno regional ha hecho un importante esfuerzo de austeridad, con una reducción del gasto del 2,28 por ciento, que permitirá no aumentar el endeudamiento de la región y, así, cumplir con el objetivo de Estabilidad Presupuestaria establecido por el Consejo de Política Fiscal y Financiera, que fija el límite de déficit en el 0,75 por ciento del PIB regional.

La austeridad se vislumbra en la congelación del sueldo de altos cargos, la eliminación de 970 plazas de funcionarios vacantes o la no contratación de personal nuevo, salvo los relacionados con la Sanidad o la Educación. "Este control del gasto es más necesario por un descenso del 26 por ciento en el dinero que el Estado entrega a la Comunidad, ya que se reducen las entregas a cuenta un 16 por ciento y la liquidación del Estado a nuestra región pasa de 1.000 millones a uno", sostuvo.

Beteta defendió desde la tribuna que "la mejor política social es crear bajar impuestos, porque el dinero está mejor en manos de los ciudadanos, y promover la creación de empleo, por lo que el objetivo de la política económica del Gobierno regional es que Madrid sea un espacio atractivo para captar inversiones privadas que generen riqueza y empleo".

Según explicó, los Presupuestos regionales responden a esta filosofía, que trata de alcanzar con tres instrumentos: la reducción de la carga fiscal a las familias y las empresas, el apoyo a los emprendedores y la austeridad en la Administración regional. Así, el Presupuesto elaborado como una herramienta activa contra la crisis, ahonda en la política de rebajas de impuestos para las familias y las empresas. "Es mejor bajar los impuestos que subvencionar, porque el dinero está mejor en manos de los ciudadanos", destacó Beteta.

AHORRO FISCAL

Los madrileños se ahorrarán el próximo año 2.100 millones de euros gracias a las bajadas tributarias, "lo que les permitirá seguir siendo los contribuyentes españoles que más se ahorran" al presentar su declaración de la Renta porque la Comunidad de Madrid fue pionera en bajar un punto el tramo autonómico del IRPF, destacó.

Así, insistió en que las actuales deducciones, que benefician directamente a los trabajadores y a las familias, se unen otras nuevas, de forma que en la declaración de la renta del próximo año medio millón de madrileños podrán deducir, además, los gastos en educación este año por la escolaridad obligatoria, el uniforme o el aprendizaje de idiomas.

Recordó que la Comunidad fue pionera en desfiscalizar el Impuesto de Sucesiones y Donaciones, de forma que el pago de este tributo en la región entre el círculo familiar más cercano es prácticamente inexistente desde el año 2007. Y, también, es la primera en anunciar que la rebaja de un punto más la reducción del IRPF en el tramo autonómico para los ciudadanos que compren su primera vivienda y en materia de vivienda, también se ha eliminado el gasto fiscal por modificar las hipotecas.

En la Ley de Acompañamiento a los Presupuestos se incluye una nueva rebaja fiscal de 158 euros en el IRPF a las familias con menos ingresos. "Se hace política social desde la bajada de impuestos, ayudando a los mileuristas frente a la subida de impuestos de un Gobierno de la Nación que sólo sabe penalizar a los ciudadanos y no acomete las reformas que son necesarias para reactivad la economía", remarcó Beteta.

Para fomentar el crecimiento de la economía y la creación de empleo, el Gobierno regional ha eliminado el recargo autonómico del Impuesto de Actividades Económicas (IAE), y en 2010 permitirá una moratoria de cinco años para el pago de tasas exigibles a pymes y autónomos, explicó. Igualmente, se permitirá que los inversores que aporten capital y conocimiento a las nuevas empresas tengan una deducción del 20 por ciento en el IRPF.

Todo ello sin olvidar los problemas de financiación de las empresas, por lo que la Comunidad ha suscrito convenios con diferentes entidades financieras que permitirán poner más de 12.600 millones de euros a disposición del tejido empresarial madrileño, o la eliminación de trabas administrativas, con la modificación de 70 normas autonómicas.

Asimismo, Beteta recalcó que el Gobierno regional ha potenciado sectores claves para el desarrollo de la región, como el comercio, el turismo o la industria, y liberaliza sectores como las actividades comerciales o la inspección de vehículos (ITV). Así, Madrid es la primera región en eliminar la segunda licencia para la apertura de grandes establecimientos.