Botella es recibida en un Centro de Mayores de Carabanchel con castañuelas, pasodobles y muchos piropos

MADRID 20 Ene. (EUROPA PRESS) -

La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha sido recibida este viernes en el Centro de Mayores San Vicente de Paúl, en Carabanchel, con castañuelas, pasodobles y un montón de piropos por parte de los residentes, que le han transmitido sus buenos deseos y su alegría por la visita.

Acompañada por la delegada de Familia y Servicios Sociales, Dolores Navarro, y por el concejal-presidente del distrito, Carlos Izquierdo, la primera edil ha recorrido las instalaciones donde casi 5.000 mayores pasan sus horas libres participando en cursos de cestas de mimbre, castañuelas, bailes de salón cante, guitarra, sevillanas o vidrieras.

Allí, los usuarios le han comentado cómo son sus días habituales --ellos suelen ir al centro por la mañana a echar la partida y vuelven a casa para comer, tras recoger a los nietos; mientras que ellas van más por la tarde y, sobre todo, los fines de semana-- y le han dedicado algunas actuaciones.

Así, una docena de personas le ha tocado un pasodoble y una jota con las castañuelas, mientras bailaban a su alrededor guiados por una gran bandera de España, y otro grupo le ha mostrado sus progresos bailando el pasodoble.

También ha tenido ocasión de charlar con los usuarios del centro, que le han dedicado multitud de piropos."¿Qué hace que esté siempre tan joven, qué ha hecho, un pacto con el diablo?", "Creía que eras más canija. ¡Qué buen tipo y qué guapa!", "Estás más joven en persona", le han dicho.

Asimismo, alguno ha aprovechado para hacerle peticiones --"A ver si nos bajan la (Tasa de) Basura y nos suben las pensiones", le han reclamado, a lo que ella ha contestado lamentando que no puede subir el sueldo a los jubilados-- y también se han acordado, de su marido, el expresidente José María Aznar, por lo que ha dicho la alcaldesa, también aficionado a las cartas.

"¿Qué es más difícil, bailar el pasodoble o pactar con los sindicatos?", le ha preguntado con sorna otro jubilado. Tras escuchar pacientemente las historias que le contaban los ancianos y hacerse fotos con muchos de ellos, la directiva del centro le ha transmitido que "echan mucho de menos" sus tiempos al frente de Familia, a lo que ella ha replicado que, a partir de ahora, la "verán mucho". De momento, ya ha pedido que la inviten a la función anual donde los usuarios muestran lo que han aprendido en los talleres.