El delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, y el concejal delegado de Limpieza y Zonas Verdes, José Antonio Martínez Páramo, introducen a los carpines rojos y a las tencas. - AYUNTAMIENTO DE MADRID
MADRID 9 Jul. (EUROPA PRESS) -
Los carpines rojos y las tencas ya nadan en el estanque de la Quinta de los Molinos tras someterse a una limpieza para retirar los lodos y eliminar especies invasoras, como las percas americanas, las gambusias y el galápago americano.
El delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, y el concejal delegado de Limpieza y Zonas Verdes, José Antonio Martínez Páramo, han introducido este miércoles a las dos especies en el lago después de que se vaciara durante la semana del 23 de junio como parte de las labores de mantenimiento anuales.
Los carpines rojos, especie de agua dulce, han regresado a su 'hogar' tras haber sido extraídos durante la limpieza, mientras que una veintena de tencas han comenzado una nueva vida en la Quinta de los Molinos por su buena adaptación a lagos y estanques.
Durante la visita, Carabante ha explicado que el vaciado formará parte de los trabajos ordinarios de mantenimiento de este tipo de instalaciones. Además, se llevan a cabo trabajos en superficie cada vez que haya acumulación de restos por caída de hoja y otros residuos y una vez al año, se realiza la limpieza del fondo.
Asimismo, ha indicado que siempre que se vacía la cubeta, se retiran los lodos y se revisa la impermeabilización existente, observando si existe alguna fisura o defecto susceptible de ser reparado. Antes de que el vaciado se complete, se capturan las especies de fauna ligadas al lago (peces y algunos reptiles), que se trasladan a otra lámina de agua próxima, de menor tamaño, para proceder a su conteo y clasificación.
Los carpines rojos fueron trasladados a uno de los estanques gemelos de la Quinta de los Molinos, provisto de bomba para asegurar la oxigenación del agua hasta su reintroducción en el lago. En esta estancia, también se detectó la presencia de percas americanas, gambusias y galápago americano, calificadas como especies exóticas invasoras.
En cumplimiento de la legislación vigente, se les aplicó las correspondientes medidas de control, autorizadas previamente por la Comunidad de Madrid, en función de las competencias que tiene atribuidas.
"La gente viene y abandona a los animales que tiene en este estanque y eso provoca muchísimo daño, no solo estructural, sino sobre todo a la biodiversidad porque acaba con el resto de las especies que sí son autóctonas como son las que estamos reintroduciendo hoy", ha detallado Carabante.
LA QUINTA DE LOS MOLINOS
El parque de la Quinta de los Molinos, originalmente finca de recreo rústico urbana con zonas de explotación agrícola y con un marcado carácter mediterráneo, se ha transformado en un espacio urbano de gran valor histórico y natural.
Esta finca, que incluye elementos arquitectónicos de elevado interés, está incluida en el Catálogo de Parques Históricos y Jardines de Interés con un nivel 1 de protección. Con cinco puertas de acceso, el parque de la Quinta de los Molinos está cerrado en su totalidad por un perímetro de cercas que limitan con la calle de Alcalá al sur, la calle de Juan Ignacio Luca de Tena al norte, la avenida del 25 de Septiembre al este y la calle de Miami al oeste.
La popularmente conocida como 'La Quinta', es especialmente conocida por sus almendros, que en los meses de febrero y marzo ofrecen un espectáculo visual impresionante con su floración, considerado uno de los mayores atractivos del parque. Por otro lado, también ofrece otras extensiones de arbolado donde destacan olivos, pinos carrascos, cipreses, cedros, plátanos, tilos, eucaliptos y algunas especies de arbustos como lilos y rosales.