CC.OO. denuncia que 80.000 trabajadores de la construcción en Madrid están en los niveles más bajos de subcontratación

Actualizado: lunes, 9 octubre 2006 15:36

MADRID, 9 Oct. (EUROPA PRESS) -

Hasta el 80 por ciento de los trabajadores de la construcción en la Comunidad de Madrid están empleados en subcontratas, pero entre un 35 y un 40 por ciento (unos 80.000) pueden encontrarse en los últimos niveles de la cadena de subcontratación, que no estarán permitidos cuando entre en vigor la Ley Reguladora de la Subcontratación que entrará en vigor el próximo año, asegura CC.OO.

En esos niveles es donde se encuentran los llamados 'pistoleros', y donde se producen el abuso laboral, la vulneración de las normas del convenio en cuanto a jornada, salario, etc,, y la ausencia de medidas de seguridad, aseguró el secretario general de la Federación de Construcción de CC.OO. de Madrid, Gerardo de Gracia.

Afirma De Gracia que esa situación es "la selva", un mundo desregularizado donde la ilegalidad campa a sus anchas. Los trabajadores extranjeros se encuentran mayoritariamente en estos niveles, y en el último se emplean incluso trabajadores irregulares en unas condiciones "rayanas con el esclavismo".

CAMPAÑA DE DENUNCIA

La Federación de Construcción de CC.OO. Madrid ha iniciado una campaña para denunciar estas situaciones y difundir la Ley Reguladora de la Subcontratación en las obras. La ley tan sólo permitirá tres niveles: promotora, contratista y un subcontratista por especialidad (ferrallas, yesaires, ladrillo visto, hormigón etc.). Éstos no podrán subcontratar con otro subcontratista ni con un trabajador autónomo. Además, las empresas deberán estar registradas en un registro de subcontratas, deberán tener organización productiva propia, recursos humanos y entre un 10 y un 30 por ciento, dependiendo de la antigüedad de la empresa, de plantilla fija.

Según Gerardo de Gracia, "con estos requisitos quedarán fuera de la ley los llamados 'pistoleros', que carecen de empresa real y se dedican al prestamismo laboral, es decir a prestar mano de obra. Son éstos "los últimos niveles de una cadena de abuso y explotación, donde se encuentran muchos trabajadores en situación irregular, desprovistos de todos sus derechos, cobrando salarios ínfimos y sin las mínimas condiciones laboral y de seguridad y salud laboral", concretó.