Cobo respeta la decisión judicial sobre Barbadillo porque "sanciona una conducta no sólo ilegal, sino ilícita"

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MADRID 17 Feb. (EUROPA PRESS) -

El vicealcalde de Madrid, Manuel Cobo, ha expresado este jueves durante la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno su respeto por la decisión judicial que condena a un año y medio de cárcel y de inhabilitación al exconcejal de la capital Jorge Barbadillo por malversación de caudales públicos durante su etapa al frente de la sociedad Campo de las Naciones.

"Lógicamente respetamos la decisión judicial. No decimos si es mucho o poco (tiempo de condena), ni lo vamos a valorar. Pero (manifestamos nuestro) respeto absoluto, porque ha habido una condena por una actuación no sólo ilegal, sino ilícita en este caso", ha indicado Cobo.

Además, ha recordado que, cuando se conocieron los hechos, el Gobierno municipal cesó a esta persona y, además, "puso a disposición de la administración de Justicia todos los elementos para que se actuara en consecuencia".

"He leído que Barbadillo acepta (la sentencia) y que no habrá recurso, por lo que no hay más que respetarla. Se ha sancionado una conducta ilícita por parte del administración de Justicia, que es lo que tiene que pasar siempre que ocurre una cosa de estas", ha zanjado.

La Audiencia Provincial de Madrid ha dictado esta semana una condena de un año y medio de prisión e inhabilitación absoluta durante dos años al exconcejal de la época de José María Álvarez del Manzano por un delito de malversación de caudales públicos en la gestión de la empresa municipal Campo de las Naciones cuando ocupaba el puesto de consejero.

En el juicio, el Ayuntamiento de Madrid, el Grupo Municipal Socialista, el fiscal y la defensa del exedil han alcanzado un acuerdo de conformidad con motivo de que el procesado ya ha satisfecho la responsabilidad civil que se le solicitaba en función del dinero que sustrajo de esta entidad.

La Fiscalía de Madrid solicitaba cinco años de prisión para Barbadillo por un delito de malversación de caudales públicos que supuestamente habría cometido entre 1999 y 2003 en la gestión como consejero delegado de la entidad pública Campo de las Naciones.