MADRID, 6 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Comunidad de Madrid ha atendido las necesidades educativas de 235 alumnos este curso 2010-2011, en periodo de convalecencia por enfermedad, mediante el Servicio de Apoyo Educativo Domiciliario (SAED), que permite a aquellos alumnos de Educación Primaria o Secundaria que por enfermedad tengan que permanecer periodos superiores a un mes de recuperación en sus casas, puedan recibir atención educativa para dar continuidad a sus estudios y así evitar un posible desfase curricular, según ha informado el Gobierno regional.
El Servicio de Apoyo Educativo Domiciliario cuenta con profesores de Educación Primaria y Secundaria que están adscritos a un centro de enseñanza. En concreto, la Consejería de Educación dispone este año de 81 profesores asignados a este servicio que han impartido ya clase en los domicilios de 235 alumnos de Educación Primaria y de Secundaria.
El funcionamiento de estas aulas requiere mantener una adecuada coordinación con el centro del alumno para trabajar, en lo posible, lo mismo que se imparte en su centro educativo, con el fin de facilitar una adecuada reincorporación del estudiante a su centro una vez transcurrido el periodo de convalecencia.
El profesor asignado a cada alumno se desplaza dos, tres o cuatro días por semana al domicilio de éste y el horario semanal de los alumnos de Primaria es de hasta ocho horas y de nueve en Secundaria. Para los alumnos más pequeños las clases se centran preferentemente en las materias instrumentales (Lengua y Matemáticas) y Conocimiento del Medio, mientras que en el caso de los estudiantes de Secundaria el trabajo se reparte entre los ámbitos socio-lingüístico y científico tecnológico.
Los alumnos que reciben este servicio en sus casas permanecen escolarizados a todos los efectos en su centro educativo de referencia y en el momento en el que reciben el alta médica pueden reincorporarse al colegio o instituto al que pertenezcan.
Si bien el servicio de las aulas domiciliarias tiene dicha organización, su principal característica es la flexibilidad y la adaptación a las necesidades específicas de cada alumno. Además, existe una comunicación constante y detallada con la familia a la que se trata de implicar lo máximo posible en el proceso educativo del alumno.
Esta iniciativa del Gobierno regional se suma a otras que también lleva a cabo como las aulas hospitalarias o los centros educativos terapéuticos dirigidos a atender las necesidades educativas de los alumnos que por enfermedad no pueden asistir temporalmente a su centro educativo.
La Comunidad dispone de 13 aulas hospitalarias que han atendido ya este curso las necesidades educativas de 3.378 alumnos. Estas aulas, ubicadas en trece hospitales de la región, permiten a los alumnos pacientes continuar su proceso educativo y que al final de su periodo de hospitalización puedan volver a su centro de referencia con la menor dificultad posible. El curso 2009-1010, recibieron atención educativa en las aulas hospitalarias madrileñas un total de 8.774 alumnos.
Del mismo modo, la Comunidad cuenta con cinco centros educativos terapéuticos que han atendido ya este curso a 148 alumnos con enfermedades psiquiátricas. Estos centros proporcionan una atención educativa especial que permita a los alumnos su adaptación y reincorporación a su centro educativo de referencia. El pasado curso los centros terapéuticos atendieron a un total de 195 alumnos.
