Condenados a dos años y medio de prisión cuatro hombres que secuestraron a otro y que se hospedaron en hoteles sin pagar

Actualizado: miércoles, 6 diciembre 2006 12:10

MADRID, 6 Dic. (EUROPA PRESS) -

La Audiencia Provincial Madrid ha condenado a dos años y seis meses de prisión a cuatro hombres acusados de secuestrar a otro y que se alojaron, antes y después de la detención ilegal, en ocho hoteles en los que no pagaron los más de 4.000 euros a los que ascendían las facturas.

La sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, considera probado que el pasado 12 de agosto del 2005 los españoles Luis C.M., Ángel R.M. y los hermanos colombianos Andrés Felipe M.R. y Víctor Hugo M.R. entraron a la fuerza en el vehículo de su amigo Rubén M.P., golpeándole en varias ocasiones, aunque no le causaron ninguna lesión.

Tras circular por varias carreteras -añade la resolución jurídica-, los cuatro acusados obligaron a Rubén M.P. a situarse en el asiento posterior del turismo, momento en el que Ángel R.M. se puso al volante del vehículo y les dijo a Andrés Felipe y a Víctor Hugo que si la víctima "se pasaba", le dieran "una puñalada en el corazón". "Vamos a ir a tu casa y vamos a estar allí toda la noche, hasta que arreglemos unos problemas", dijo Ángel a la víctima.

SI VENÍA LA POLICÍA DIRÍAN QUE ERA UNA BROMA

Las cinco personas se dirigieron a la vivienda de Rubén M.P., donde los inculpados se apoderaron de las llaves de la casa y de dos teléfonos móviles, con el objetivo de que el denunciante no avisara a la policía. Además, le dijeron que si venía la policía les dirían que era una broma. En el domicilio se encontraba el hermano de la víctima, Ricardo M.P., a quien Rubén M.P. le dijo que se fuera a dormir.

Todos ellos permanecieron en la vivienda hasta las ocho de la mañana del día siguiente, momento en el que Luis C.M. y Ángel R.M. se marcharon con el vehículo del agredido. Al poco tiempo, telefonearon a Rubén M.P. para decirle que venderían su coche si no les entregaba 2.000 euros. En ese momento, la víctima le dijo a su hermano que estaba secuestrado, y, al poco tiempo, los dos consiguieron escapar de la casa y bajar a la portería, desde donde llamaron a la policía.

Al percatarse de este llamada, Andrés Felipe M.R. y Víctor Hugo M.R. huyeron del domicilio. Minutos después se pusieron en contacto con los otros dos inculpados, con los que se reunieron y se marcharon a Reinosa (Cantabria), donde se alojaron en cuatro hoteles. Posteriormente se hospedaron en otros tres establecimientos hoteleros de Santander.

EN EL JUICIO NEGARON LOS HECHOS

Los acusados no abonaron las facturas ni en estos siete hoteles ni en otro de Madrid capital, donde durmieron los días previos al suceso. En la vista oral celebrada a mediados de septiembre en la Audiencia Provincial de Madrid, todos ellos negaron los hechos y aseguraron que fue Rubén M.P. quien les invitó a su casa después de pasar la noche en varios clubes.

Además, los cuatro procesados destacaron en ese juicio que "en ningún momento" amenazaron o golpearon a la víctima. Por contra, sí admitieron las deudas con los hoteles, pero indicaron que iban a abonar las facturas cuando recibieran un ingreso por unas reformas que habían realizado.

En la sentencia el Tribunal manifiesta que "no tiene dudas de que Rubén M.P. fue obligado, en contra de su voluntad, a desplazarse en compañía de los acusados y que estuvo privado de libertad", lo que supone "un hecho constitutivo de un delito básico de detención ilegal".

Además, la resolución jurídica destaca que "la víctima y los acusados tenían una relación previa de amistad, y entra dentro de lo posible que entre Rubén M.P. y alguno de los acusados mediara algún negocio o acuerdo que no ha sido puesto en conocimiento de la Sala, extremo que parece más posible que una inopinada presión para obtener de la víctima 2.000 euros a cambio de nada".

La sentencia les condena a dos años y seis meses de prisión, pero les absuelve de los delitos de robo, extorsión, daños, amenazas y allanamiento de morada de los que habían sido acusados. Finalmente, deberán indemnizar conjunta y solidariamente a Rubén M.P. con 3.000 euros y no podrán acercarse ni comunicarse con la víctima durante tres años.