Desmantelada una banda rumana de ladrones cuyo jefe presuntamente quemó y mató en enero a una compatriota en Alcalá

Actualizado: lunes, 11 febrero 2008 14:26

MADRID, 11 Feb. (EUROPA PRESS) -

La Guardia Civil ha desmantelado una banda organizada de ladrones, acusada de cometer más de 60 robos en viviendas y locales de toda España, tras la detención de 23 personas de nacionalidad rumana cuyo cabecilla era el joven detenido en enero por la Policía Nacional como presunto autor del asesinato de una joven, compatriota rumana de 22 años, a la que prendió fuego en un descampado de Alcalá de Henares.

El suceso ocurrió en la madrugada del pasado 23 de enero en el Camino Viejo de Camarma de la ciudad complutense, donde ambos jóvenes, que se encontraban en el interior de un vehículo aparcado en un descampado, comenzaron una discusión. En un momento dado y tras abandonar el vehículo en el que se encontraban, él roció con un líquido inflamable a la joven y le prendió fuego.

Minutos después, el agresor, de unos 20 años, se puso en contacto con el teléfono de emergencias 112 y confesó los hechos. Los sanitarios certificaron la muerte y luego atendieron al joven, ya que presentaba quemaduras en las manos. Fue trasladado al hospital en calidad de detenido.

OPERACIÓN 'PALLOZAS'

La denominada operación 'Pallozas' se inició en octubre de 2007, cuando la Guardia Civil de León detectó un incremento de robos en viviendas y locales comerciales de Castilla y León mediante la técnica del butrón (abertura en paredes o techos) o el acceso a la fuerza a dichos lugares.

Posteriores investigaciones determinaron que los autores materiales de los robos eran los miembros de un grupo organizado de ciudadanos rumanos asentados en su mayoría en localidades del Corredor del Henares madrileño. Una vez identificados, Unidades Especiales de Intervención de la Guardia Civil accedieron simultáneamente a diez domicilios en los que residía la banda, donde detuvieron a sus 23 integrantes.

'MODUS OPERANDI'.

La banda organizada se distribuía en grupos de 4 ó 5 personas distribuidas en dos vehículos para cometer los robos. Tras efectuar un reconocimiento previo del lugar elegido, los presuntos delincuentes esperaban hasta altas horas de la madrugada para acceder a las viviendas y locales a través de butrones en paredes o tejados, o forzando con palanquetas otras vías de acceso. Posteriormente y con el botín en su poder, emprendían el regreso a sus lugares de residencia.

A la mañana siguiente, el grupo se movilizaba para dar salida a los efectos sustraídos, bien, mediante receptadores que adquirían los objetos o a través de empresas clandestinas de transporte de mercancías, que trasladaban los efectos sustraídos hasta su país de origen.

Durante la fase de explotación de la operación se ha procedido a la detención de un total de 23 personas de nacionalidad rumana (22 hombres y una mujer), y se han practicado un total de 10 registros domiciliarios en las localidades de Madrid, Boadilla del Monte, Coslada, San Fernando de Henares y Alcalá de Henares, Guadalajara, Úbeda (Jaén) y La Solana (Ciudad Real).

En el operativo realizado por la Guardia Civil se ha intervenido gran cantidad de material producto de los robos tales como televisores de plasma, ordenadores portátiles, teléfonos móviles, gafas y perfumes de marca, joyas, dinero y herramientas utilizadas en la comisión de los robos.

Asimismo, se ha intervenido una sofisticada herramienta de medición de la densidad y calidad del hormigón, utilizada por la banda a la hora de acceder a los lugares mediante butrones.