MADRID, 15 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia Provincial de Madrid juzgó hoy a una joven acusada de realizar llamadas desde el teléfono móvil de la empresa a su novio y a sus padres, entre otros, por un valor de 1.330 euros, hechos ocurridos entre mayo de 2002 y julio de 2003 por los que el fiscal solicita que indemnice a la empresa con 1.800 euros de multa, además de la devolución del importe de las llamadas.
El escrito del representante del Ministerio Fiscal, al que ha tenido acceso Europa Press, considera probado que la empresa 'Soluciones Para el Medio Ambiente S.L.' decidió cambiar sus teléfonos móviles del operador 'Movistar' al operador 'Vodafone', sin que se cancelaran los números de la primera empresa. Así, Debora María, una empleada de 'Soluciones Para el Medio Ambiente S.L.', se apoderó de una tarjeta de 'Movistar' y, tras manipularla, la desvió a un número de teléfono inexistente. Con este procedimiento, la acusada consiguió restringir las llamadas entrantes, de tal modo que el móvil sólo podía realizar llamadas salientes.
El Ministerio Pública manifiesta que la imputada realizó llamadas desde este teléfono entre mayo de 2002 y julio de 2003, cargando a la empresa una factura total de 1.330 euros. Además, el fiscal pidió a los jueces que valoraran "si pudo haber otras personas que hicieran más llamadas". Por estos hechos narrados, el fiscal solicita que la encausada devuelva a la empresa la cantidad defraudada más una multa 1.800 euros. Por su parte, la acusación particular solicita que devuelva el dinero de las llamadas y pide una multa de 4.320 euros.
LA ACUSADA NIEGA LOS HECHOS
Durante el juicio celebrado esta mañana en la Audiencia madrileña, al igual que durante todo el proceso judicial, la encausada negó los hechos que se le imputan. Mientras, una de las dueñas de la empresa declaró ante los jueces que descubrieron "llamadas al teléfono de su novio y de sus padres". "Hicimos una comprobación con de los teléfonos que teníamos de los padres de los empleados, y no se encontraron de nadie más que de ella", dijo, aunque reconoció que no siguieron investigando los demás números que aparecían en la factura porque lo tenían "claro".
Mientras, el abogado de la defensa reclamó la libre absolución para su patrocinada. "Ella podía haber pagado al principio de todo este proceso el dinero que la empresa reclamaba, pero como ella no ha cometido ese delito, ha querido llegar hasta el final. Además, hay un número de teléfono al que se ha llamado en 148 ocasiones y no sabemos quién lo hizo. Hay cierta animadversión de los responsables de la empresa hacia mi representada", concluyó. El juicio ha quedado visto para sentencia.
