EP/AYUNTAMIENTO DE MADRID
MADRID, 1 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Fundación José María Llanos abrirá el próximo mes de octubre un nuevo Centro de Acogida, Formación y Empleo de Mujeres Víctimas de Violencia de Género, donde se dará atención integral a estas personas y que contará incluso con 16 apartamentos para mujeres que tengan que abandonar sus hogares.
La construcción y equipamiento de este recurso correrá a cargo del Ministerio del Interior (3 millones de euros) y el Ayuntamiento de Madrid (1,5 millones de euros), que financiarán el proyecto este año y el próximo. Por su parte, la Fundación Padre Llanos reclama a la Comunidad de Madrid que aporte también 1,5 millones de euros al proyecto.
Así, el Centro, de 5.000 metros cuadrados y ubicado en el Pozo del Tío Raimundo, contará por una parte con un centro de acogida con 16 apartamentos --dos de ellos adaptados para minusválidos y uno reservado para casos de emergencia-- en los que podrán vivir mujeres con sus hijos, hasta un total de entre 30 y 40 personas.
Por otra parte, en el Centro Integral para mujeres, abierto de 9 a 21 horas no sólo a las residentes sino a cualquier víctima de violencia de género o desestructuración familiar, se dará todo tipo de información: social, jurídica, psicológica, de empleo...
Finalmente, el Centro de Formación y Empleo ofrecerá cursos de formación laboral a las mujeres madrileñas víctimas de violencia doméstica. La temática de estos cursos dependerá de la demanda, aunque tendrá un lugar especial la hostelería, dado que la Fundación cuenta en el mismo recinto con una escuela de este sector.
En total, entre 25 y 30 personas trabajarán a tiempo completo en este centro, al que las mujeres llegarán a través del Servicio de Atención Domiciliaria (SAD). Además, el centro contará con guardería y ludoteca para las mujeres que no tengan con quién dejar a sus hijos mientras asisten a los cursos.
TODOS CONTRA LA VIOLENCIA DE GÉNERO
Las aportaciones de las administraciones a este proyecto se plasmaron hoy en la firma de sendos convenios entre la Fundación y el Ministerio de Igualdad y el Ayuntamiento de Madrid. Así, acompañando al presidente de la Fundación Padre Llanos, Laurentino de Miguel, visitaron el centro la ministra Bibiana Aído y el alcalde de la capital, Alberto Ruiz-Gallardón.
Aído calificó las instalaciones de "centro muy completo y práctico" ya que "suma a la atención ante emergencias el apoyo, la acogida y la recuperación del proyecto de vida autónoma", que son "justamente los objetivos que marca la Ley".
Además, durante su intervención la responsable estatal volvió a solidarizarse con los familiares y amigos de las dos víctimas mortales conocidas ayer, y recordó que "hay que ser muy valiente" para tomar la decisión de salir de esa "espiral de violencia", que lleva a estas personas a "vivir bajo el miedo y la coacción".
"(Esas personas) deben saber que pueden tomar la decisión porque la sociedad y las administraciones públicas les apoyan, amparan y respaldan. Y ante cualquier hombre que denigre o le levante la mano a una mujer deben saber que está la sociedad dispuesta a plantarles cara con todos los mecanismos legales", afirmó Aído.
Tras recordar que "de la violencia de género se puede salir", la titular de Igualdad pidió a las víctimas que "no se resignen a vivir sin derechos, oportunidades y dignidad" y recordó una vez más la importancia de que el entorno de estas personas y la sociedad en su conjunto intervengan.
"Basta de silencio, tolerancia y complicidad. El primer paso es la denuncia para entrar en el sistema de prevención y protección", exhortó, recordando asimismo que existe un "compromiso serio, firme y compartido entre las administraciones públicas y la sociedad civil" para "acabar con esta violencia que mina la sociedad".
TRABAJAR POR EL FUTURO
Por su parte, Gallardón comparó la aceptación social de la violencia de género con la que hace más de un siglo existía hacia la esclavitud. "Ojalá las generaciones futuras nos recuerden como la sociedad que fue capaz de abolir este comportamiento", deseó.
Así, llamó a un "sentimiento de rebeldía intelectual, protesta, inconformismo y repulsa" ante "el problema más grave de convivencia de la sociedad actual" y pidió a los poderes públicos que "actúen con independencia del reparto de competencias".
"Hoy renovamos nuestro compromiso de lucha, y lo hacemos en buena compañía: la del Gobierno. Es fundamental que todos nos impliquemos en esta batalla, al margen de la ideología política", reclamó.
Tras recordar que Madrid fue "pionera" en la lucha contra este fenómeno, abogó por la "educación en valores" como fórmula de solución, y recordó que "casi siempre, antes de la violencia física, ha habido otros tipos de violencia y símbolos que luego derivan en hechos irreparables".
"Nosotros no podemos permanecer silentes y, por tanto, cómplices. Tenemos que identificar el sentimiento de los ciudadanos que, desde luego, apoyan rotundamente una acción para que la herida más profunda de nuestra sociedad cicatrice", concluyó.
Finalmente, Laurentino de Miguel consideró el proyecto del centro "maravilloso", agradeció el respaldo de las administraciones y aseguró que la Fundación del Padre Llanos "no defraudará".
Al acto también asistieron los portavoces de los tres grupos con representación en el Ayuntamiento de Madrid, Manuel Cobo (PP), David Lucas (PSOE) y Ángel Pérez (IU).