La implantación de la tarjeta sin contacto del transporte supondrá la instalación de 7000 validadoras en toda la región

El Consorcio negocia con Renfe para posibilitar la extensión de la tarjeta también a su red

Europa Press Madrid
Actualizado: sábado, 8 octubre 2011 15:00

MADRID, 8 Oct. (EUROPA PRESS) -

La implantación de la tarjeta sin contacto del transporte supondrá la instalación de 7.000 validadoras en toda la región, según los datos que ha puesto de manifiesto esta semana el gerente del Consorcio Regional de Transportes, José Manuel Pradillo.

Durante su comparecencia en la Comisión de Transportes de la Asamblea de Madrid, Pradillo explicó que las canceladoras ya están instaladas en toda la zona A y ha avanzado que a primeros de año estarán situadas en sus posiciones las canceladoras de los autobuses y del Metro Ligero.

Además, tendrá que "rematarse" su instalación en la red del suburbano y cerrar la negociación con Renfe para que el uso de la tarjeta sin contacto llegue también al tren. "Estamos en negociaciones, pero el momento actual es complejo", ha anunciado.

Pradillo ha explicado que la instalación de estos dispositivos lleva su tiempo porque es necesario introducir el cableado necesario en los autobuses, lo que dificulta que este proceso de renovación se pueda llevar a cabo con más rapidez.

El gerente del Consorcio ha dicho que la institución que dirige no tendrá que pagar nada por la instalación de las canceladoras en los autobuses interurbanos, aunque sí en el caso de Metro y EMT. También ha revelado que ellos han tenido que pagar las de la 'corona A' de la red de Cercanías.

PRECIO

La tarjeta sin contacto del transporte público se extenderá al abono de la zona A durante el año 2012 (tanto al abono joven como al general), llegará a toda la región y a los usuarios de la tercera edad un año después y costará unos 3 euros reembolsables.

Pradillo explicó que se pagará unos 3 euros por adquirirla que se podrán devolver en caso de que se deje de utilizar. También confirmó que se está "echando un pulso" con los bancos para que la "red de distribución" incluya también los cajeros automáticos.

"La tarjeta se comprará una única vez. ¿Por cuánto andará? Estará entorno a los tres euros, pero en todos los sitios donde está implantada uno ya deja de usarla, va y le reembolsan el dinero. Es como si fuera el casco de antes de las bebidas", puso como ejemplo.

Además, indicó que ya están instaladas "todas las canceladoras" en la 'corona A', lo que permitirá la implantación el próximo año en esa zona, excepto para el abono de la tercera edad, pues este no sólo es válido en la capital sino también en el resto de la región.

"En 2013, se extenderá en bloque al abono de la tercera edad y al normal en toda la región. De este modo, a finales de ese año, estará todo (el sistema de transportes funcionando) con la tarjeta sin contacto", dijo.

El gerente del Consorcio, que reconoció que quizás se han "dormido un poco" en este asunto, del que también destacó su carácter cambiante a causa de la evolución de la tecnología, explicó algunos detalles técnicos de la tarjeta sin contacto, como el hecho de que su tiempo de 'cancelación' sea de 0,2 segundos frente al 1,5 segundos actuales.

Además, la tarjeta permitirá saber "los orígenes y los destinos" de las personas que usan el transporte público madrileño, algo que hasta ahora sólo se podía hacer a través de la realización de diferentes encuestas.

Pradillo explicó que este sistema será "más barato en la adquisición, más barato en su mantenimiento, más fiable y más difícil de falsificar" y confirmó que todavía se está estudiando si se mantiene el actual sistema de venta para un mes o si se implanta el de 30 días naturales desde la adquisición del abono, como han demandado algunos usuarios.

Artículos Relacionados

Contenido patrocinado