MADRID, 13 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Grupo Parlamentario de Izquierda Unida (IU) presentará en la Comisión de Educación de la Asamblea de Madrid una proposición no de ley (PNL) mediante la que pedirá al Gobierno de Esperanza Aguirre que no conceda nuevos conciertos educativos para el próximo curso a los colegios privados que "segreguen a niños y niñas por razón de sexo".
La iniciativa surge como respuesta de la coalición a las subvenciones públicas que el Ejecutivo regional tiene previsto dar a centros como el proyecto Antares de Alcorcón, impulsado por el Opus Dei; o el denominado Tiempos Más Nuevos de Pozuelo de Alarcón, que promueve el movimiento Schoenstatt, vinculado a personas que la coalición relaciona con la dictadura de Pinochet.
En la proposición, IU pide la retirada de los conciertos a estos dos centros, que "defienden en su ideario la separación de niños y niñas", y solicita la retirada de ayudas a todos los colegios madrileños que "incumplan el principio constitucional de no discriminación por razón de nacimiento, raza, sexo, religión u opinión".
VEINTE AÑOS SIN UN NUEVO CONCIERTO
La diputada Reyes Montiel, encargada de impulsar la iniciativa, advierte de que hacía veinte años que la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid "no concedía un nuevo concierto a un colegio que segrega por su sexo a los niños de las niñas", en referencia al proyecto Antares, que dividirá su oferta educativa en dos centros contiguos: el Fuenllana para las niñas, que hasta este curso se encuentra ubicado en el distrito de Tetuán; y el Andel para los niños, cuyo concierto es de nueva creación.
IU también pide al Ejecutivo de Esperanza Aguirre que se comprometa a "garantizar que los valores de igualdad entre niños y niñas estén presentes en el sistema educativo". A juicio de la coalición, los centros educativos que segregan a niños y niñas "están incumpliendo el artículo 14 de la Constitución Española", que establece que "los españoles son iguales ante la ley", ya que, desde su punto de vista, "están discriminando, en cada caso, el derecho de niños o de niñas a recibir la educación en dicho centro".
"La discriminación por razón de sexo que se aplica en dichos centros debería ser motivo de intervención por parte de las administraciones públicas, cuando menos a la hora de no subvencionar a instituciones que promueven la desigualdad de género", defiende Montiel.
