MADRID, 24 Feb. (EUROPA PRESS) -
La titular del Juzgado de Instrucción número 23 de Madrid ha autorizado a Metro a continuar con sus trabajos de desamiantado en los trenes a través de empresas especializadas RERA, por lo que levanta la suspensión de estas labores decretadas la semana pasada.
Así lo han indicado a Europa Press fuentes del suburbano para añadir que la juez María Isabel Garaizaba ha remitido un auto aclaratorio en el que traslada al suburbano que puede continuar "con normalidad" sus trabajos de desamiantado con empresas especializabas, algo que estaba haciendo la compañía hasta ahora.
Metro de Madrid acordó la suspensión de estos trabajos de retirada de asbesto en su material móvil tras la comunicación de la Policía Judicial de un oficio del Juzgado, que investiga la presunta responsabilidad penal a siete antiguos cargos del Área de Salud Laboral en la muerte de dos trabajadores por exposición a amianto.
En dicho auto, al que ha tenido acceso Europa Press, se estipula por la magistrada que "no existe inconveniente alguno" para que Metro de Madrid pueda seguir realizando las labores de desamiantado, "debiendo solo abstenerse de permitir que por parte de personal pueda actuarse sobre piezas o elementos de ese material móvil que contenga asbesto (extremos reservados a las empresas RERA".
"Pero no se prohíbe que se pueda actuar sobre aquellos coches o elementos que, estando en servicio o fuera de él, contenga algún elemento o pieza que sí contenga amianto y que está a la espera de su retirada o sustitución por la empresa RERA".
También recuerda al suburbano "su deber de colaborar en la instrucción de la presente causa atendiendo los requerimientos que en relación a la misma le sean realizados directamente por este órgano judicial o bien a través de la Policía Judicial".
En su argumentación, la magistrada recalca que "ante los genéricos o incluso vagos términos" en los que el escrito del Sindicato de Maquinistas sobre presunta destrucción de pruebas, se optó "en aras a extremar las precauciones", se procedió a verificar si tales manifestaciones "tenían o no algún tipo de fundamento".
"CARECE DE SENTIDO LA RADICAL INTERPRETACIÓN DE METRO AL OFICIO"
La instrucción de la presente causa permite "concluir que, en principio, la actuación de Metro a partir de 2017 es correcta en cuanto al tratamiento del amianto (o proceso de desamiantado) a través de las correspondientes empresas RERA" acorde con los protocolos establecidos, apunta el auto.
"A la vista de todos los extremos expuestos es evidente que carece de sentido alguno la radical interpretación que se ha realizado por Metro de Madrid en orden a dar cumplimiento a este primer punto del requerimiento", detalla el auto para aclarar que se reanuda estas labores para "poner fin a esta situación que carece de lógica".
Por ello, explica al suburbano que lo único que se prohíbe es que se permita al personal del Metro pueda actuar sobre piezas o elementos de material móvil que contengan amianto, de tal forma que puedan estar expuestos al mismo "pero no que se pueda actuar sobre aquellos coches o elementos que, estando en servicio o fuera de él, contengan algún elemento o pieza que sí lo contenga y que está a la espera de su retirada o sustitución".
La juez por otra parte muestra lo "sorprendente" que aprecia que Metro, objeto de este procedimiento en su condición de posible responsable civil subsidiario y a pesar del "alcance" de hechos investigados, "no se haya personado hasta el momento en la misma, lo que le permitiría tener pleno y puntual conocimiento de todo lo actuado".
METRO CONTINÚA CON SU PLAN DE DESAMIANTADO
Desde Metro han señalado que, ante esta decisión judicial, continúa con su plan de desamiantado cuyo objetivo es la eliminación de este material de toda la red de Metro en 2025 con una inversión de 140 millones de euros.
Esta aclaración de juzgado se produce a instancias de Metro, después de una denuncia del Sindicato de Maquinistas en la que manifestaban sus sospechas de que la empresa estaba destruyendo pruebas en los trabajos de desamiantado de los trenes clásicos.
"En ningún momento Metro ha ocultado pruebas relacionadas con la presencia de amianto en los trenes", han expuesto las mismas fuentes para incidir en que el plan de retirada de amianto está consensuado con cuatro de los seis sindicatos en la empresa e implica que "cada vez que se va a realizar cualquier operación relativa al desamiantado se comunica a todos los trabajadores".
Así, insisten en que todo el proceso de desamiantado se comunica a los delegados de seguridad y salud de los sindicatos, actuaciones que cuentan, a su vez, con la aprobación de los planes de trabajo por parte del Instituto Regional de Seguridad y Salud en el Trabajo.
