Móstoles.- Vodafone retirará una de las antenas de telefonía que los vecinos culpan de ser origen de enfermedades

Actualizado: lunes, 9 abril 2007 16:39

El TSJM confirma la decisión del Ayuntamiento de Móstoles de suspender su actividad por ausencia de licencia

MADRID, 9 Abr. (EUROPA PRESS) -

La compañía Vodafone retirará en los próximos días la antena de telefonía móvil situada en el número 1 de la calle Julio Romero de Móstoles después de que se haya agotado el contrato que mantenía con la comunidad de propietarios y de que los vecinos llevaran el caso a los tribunales en varias ocasiones por la aparición de cáncer en doce habitantes del edificio con resultado de muerte en cinco de ellos.

Según explicó a Europa Press Antonio Gómez, uno de los vecinos que más ha luchado por la retirada de estas antenas, esta decisión viene forzada por la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) de diciembre pasado. En ésta, el TSJM desestimó el recurso de apelación presentado por Vodafone contra la decisión del Ayuntamiento de Móstoles de diciembre de 2004 de suspender cautelarmente el funcionamiento de la antena.

Por su parte, fuentes de Vodafone informaron a Europa Press que esta antena se encontraba fuera de servicio desde hace más de un año y que las razones son exclusivamente el fin del contrato. "Se ha acabado el contrato con la comunidad de propietarios y por eso se va a retirar", afirmaron, al tiempo que subrayaron que Vodafone ha ganado recientemente un litigio con el Ayuntamiento para concederle licencia de actividad.

No obstante, la sentencia del TSJM asegura que el Consistorio actuó correctamente pues "la mera solicitud de la licencia no faculta para el ejercicio de la actividad" y la ausencia de este permiso faculta a la Administración para decretar la clausura para garantizar el "superior principio de respeto a la seguridad de los ciudadanos".

Además, el texto, al que tuvo acceso Europa Press, apunta que ésta es una actividad calificada dentro del Reglamento de Actividades, Molestas, Insalubres, Nocivas y Peligrosas, por lo que debía disponer de licencia y no podría comenzar a ejercer la actividad sin que antes se gire la oportuna visita de comprobación por el funcionario técnico competente.

En este caso, sostiene que debe tenerse en cuenta, además, la Ley que establece la necesidad de evaluación de impacto ambiental para las instalaciones base de telecomunicaciones que operen con radiofrecuencias.

En enero pasado, Antonio Gómez presentó una nueva denuncia, esta vez por la vía penal, contra lo que denomina el "Triangulo de la muerte" formado por tres antenas de telefonía situadas en las calles Pintor Zuloaga, 3, la Españoleta, 3 y Julio Romero 1, así como contra las comunidades de vecinos "consentidoras" de la instalaciones de las antenas, además de contra el Ayuntamiento por permitirlo.

Según asegura este vecino, en 500 metros cuadrados se han producido más de 40 muertes y alrededor de 100 personas han sido afectadas por cáncer, sobre todo melanomas, colon y leucemias. Gómez cuenta con el respaldo de la Asociación Vallisoletana de Afectados por Antenas de Telecomunicaciones, que ha hecho un llamamiento a expertos para que testifiquen sobre la aparición en Móstoles de la llamada "enfermedad del progreso" derivada de radiaciones no ionizantes, con el fin de declarar la inconstitucionalidad de la normativa vigente por establecer unos baremos de emisiones que atentan contra la salud.