MADRID, 17 May. (EUROPA PRESS) -
Los proyectos de soterramiento de la M-30 y de urbanización de la superficie recuperada en Madrid Río servirán como ejemplo técnico para la recuperación del río Mapocho en Santiago de Chile, según avanzó hoy el presidente chileno, Sebastián Piñera, tras visitar la zona acompañado por el alcalde de la capital, Alberto Ruiz-Gallardón.
Piñera agradeció al primer edil la visita a un proyecto que calificó de "verdadera revolución". "La M-30 era para los automóviles, pero dividía y distanciaba a las personas y les impedía disfrutar del río. Ahora, este proyecto ha devuelto a los ciudadanos el derecho a disfrutar de su río", indicó.
Tras declararse "impresionado" por una obra que "pone a las personas y no a los vehículos en el centro de la ciudad", aseguró que se sentía "muy inspirado" por el proyecto y que le serviría de ejemplo para una iniciativa similar que quieren efectuar en Santiago de Chile.
"Queremos recuperar el río Mapocho para la gente. También es un río con poco caudal, pero con el sistema de presas que hemos visto podremos aumentarlo y devolvérselo a la gente como un río navegable. Lo que hemos visto es una muestra de lo que podemos hacer en Santiago", reconoció.
Por ello, agradeció a los responsables municipales madrileños que hayan puesto a su disposición todo el proyecto técnico de Madrid Calle 30 y Madrid Río para poder acceder al "conocimiento técnico y experiencia, que no a las tuneladoras," de cara a que el Ejecutivo chileno realice su propia iniciativa.
MAYOR REORDENACIÓN URBANA DE EUROPA
Por su parte, Gallardón apuntó que la transformación de todo el entorno del Manzanares en las dos últimas legislaturas ha supuesto "la mayor reordenación urbana vivida en Europa en los últimos años, salvo por Berlín tras la caída del muro".
"El río Manzanares no era un muro, pero sí era una brecha que separaba distritos y ciudadanos. Ahora hemos corregido los errores del pasado con una visión de futuro, que hace perfectamente compatible mantener la competitividad y la movilidad de la ciudad con la recuperación de espacios para los madrileños", explicó.
Así, recordó que en ambos proyectos se han invertido 4.050 millones de euros (financiados al 93,7 por ciento por las arcas municipales) para recuperar un millón de metros cuadrados "sin un sólo metro de aprovechamiento lucrativo" y rehabilitar un total de 6,9 millones de metros cuadrados, según apostilló.
Entre los beneficios ciudadanos que estas intervenciones han supuesto, destacó la mejora de la calidad de vida, el aumento de la competitividad y la movilidad, la caída de la siniestralidad en un 50 por ciento, la reducción de la contaminación atmosférica y del ruido y el aumento de las zonas verdes y estanciales.
"Conciliamos las necesidades de una ciudad moderna con las necesidades de los ciudadanos, de las que nunca se les debió privar", concluyó Gallardón.
