PSM propone una reforma fiscal alternativa a la del PP que baje impuestos a los que menos tienen

Actualizado: martes, 17 diciembre 2013 22:34

MADRID, 5 Dic. (EUROPA PRESS) -

El portavoz económico del Partido Socialista de Madrid (PSM), Antonio Miguel Carmona, ha criticado este jueves la reforma fiscal presentada por el Gobierno de la Comunidad de Madrid en los presupuestos para 2014 y ha propuesto una reforma fiscal alternativa que apueste por la "equidad" y baje impuestos a los que menos tienen.

En el pleno de presupuestos de la Asamblea de Madrid, donde Carmona ha defendido la enmienda a la totalidad presentada por el Grupo Parlamentario Socialista a los presupuestos de la Comunidad para 2014, el socialista ha dicho que la reforma que proponen "respeta el equilibrio presupuestario", porque "supone una disminución del Impuesto Sobre la Renta para las Personas Físicas (IRPF) para las rentas menores de un 50 por ciento superior" a la realizada por la Comunidad y al mismo tiempo, un recargo a las rentas mayores.

Dentro de sus medidas fiscales, el PSM propone que las rentas más bajas paguen un 10,8 por ciento en lugar del 12 por ciento que pagarían ahora con la reforma planteada por la Comunidad de Madrid, mientras que las más altas paguen un 23 por ciento frente al 21,5 por ciento que al que tributan con la reforma de los populares.

Así, ha explicado, que una persona con una base liquidable de 10.000 euros ahorraría 120 euros con la reforma socialista frente a los 40 euros que, a su juicio, ahorra ahora con la propuesta del PP, y a renglón seguido, ha añadido que que una persona con una base liquidable de 100.000 euros "pagará 400 euros más".

En concreto el PSM propone disminuir las tasas que fueron incorporadas e incrementadas en 2012 y 2013, que "impactan sobre los más desfavorecidos" y el cambio en los tipos de IRPF para ganar equidad manteniéndose la misma recaudación, la eliminación de la bonificación fiscal para las mayores sucesiones y donaciones para recaudar 1.100 millones de euros y la creación de un impuesto a la banca que permitirían recaudar 300 millones.