Los socialistas sostienen que les ha acusado de connivencia con la banda terrorista
MADRID, 6 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los concejales socialistas han abandonado este jueves el Pleno de Puente de Vallecas y amenazan con no volver hasta que la presidenta, Eva Durán, "retire sus palabras o sea cesada" después de acusarles de "connivencia con ETA".
"Eva Durán, que además es diputada nacional, nos ha acusado de estar en connivencia con el terrorismo de ETA, de dar una mano a las víctimas y otra a los terroristas", ha relatado a Europa Press el portavoz socialista en el distrito, Pablo García-Rojo.
El rifirrafe ha surgido tras la proposición conjunta presentada por PSOE e IU para que el instituto Vallecas I pase a denominarse Yolanda González Martín, en recuerdo a la joven asesinada el 1 de febrero de 1980 en el barrio de Aluche por ultraderechistas de Fuerza Nueva, capitaneados por Emilio Hellín Moro, que años después colaboraría con el Ayuntamiento de Madrid en asuntos de formación. Se da la circunstancia de que González estudió en ese IES.
Lo que proponían PSOE e IU era que el Pleno elevase el cambio de denominación a la consejería de Educación de la Comunidad, que es quien tiene las competencias. Los 'populares' han votado en contra argumentando que, en primer lugar, la proposición no se ha consensuado en junta de portavoces y, en segundo, que no era el procedimiento adecuado.
Y es que, como han explicado fuentes municipales a Europa Press, el cambio de denominación del instituto debería venir del claustro de profesores y después elevarlo a la dirección territorial, que a su vez se lo pasaría a la consejería de Educación para, finalmente, aprobarse en el Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid.
CASO FAISÁN
"El PP ha votado que no a esta propuesta, que no era el procedimiento administrativo adecuado y de manera insultante, después de sacar a colación el caso Faisán, nos ha acusado de estar en connivencia con ETA", ha relatado el socialista García-Rojo.
Es por eso que los socialistas han anunciado tras abandonar la sesión plenaria que no regresarán hasta que la alcaldesa, Ana Botella, "haga rectificar a Eva Durán, cuando retire sus palabras o sea cesada".
Por otro lado, el socialista ha considerado que el rechazo a la propuesta presentada no hace más que "evitar el reconocimiento a una víctima del terrorismo", algo "impresentable" en Vallecas, donde se levanta un monolito en la avenida Peñaprieta que recuerda a las víctimas de ETA por el atentado contra efectivos de la Armada, además de un monumento en El Pozo en homenaje a los desaparecidos y heridos del 11-M.
SÍ HABRÁ RECONOCIMIENTO A GONZÁLEZ EN LATINA
Yolanda González sí será recordada pero en Latina después de que el Pleno del distrito aprobara el pasado 14 de mayo iniciar los trámites para que se le asigne el nombre de una calle o equipamiento municipal.
González, de 19 años, era militante del Partido Socialista de los Trabajadores. Fue secuestrada el 1 de febrero en su domicilio, situado en la calle Tembleque, en el barrio de Aluche. Los secuestradores consiguieron engañarla mostrando carnés falsos de autoridades policiales.
La joven fue asesinada por los miembros de Fuerza Nueva Emilio Hellín Moro e Ignacio Abad Velázquez. La Audiencia Nacional condenó al primero a 43 años de cárcel por asesinato, allanamiento de morada, detención ilegal, depósito de armas de guerra, armas de defensa, municiones, tenencia de explosivos, falsificación de DNI y uso público de nombre supuesto.
Por estos delitos fue condenado y pasó algunos años en prisión aunque consiguió huir del país aprovechando un permiso acogiéndose al amparo que le dio el Gobierno de Paraguay. En los años 90 fue deportado a España, cumplió la condena que le restaba y salió en libertad en 1996.
Se da la circunstancia de que Hellín Moro, bajo otro nombre, colaboró con el Ayuntamiento hasta hace unos meses. Lo hizo como profesor externo en materia de seguridad. Desde el equipo de Gobierno alegaron que los antecedentes del ultraderechista condenado pasaron "inadvertidos", a lo que el portavoz de IU de Seguridad, Ángel Lara, replicó que es un "apellido inolvidable" para cualquier persona que hubiera sufrido los momentos más duros de la Transición.
Hellín Moro cambió su nombre --de Emilio pasó a Luis Enrique-- y empezó a dar clases sobre seguridad en distintas administraciones. Llegó como profesor externo al CIFSE municipal en 2011, cuando fue contratado para dar un total de 25 horas de clases en dos años. Tenía como aval su formación como ingeniero superior de Telecomunicaciones y su experiencia demostrada al haber impartido cursos a la Guardia Civil sobre delitos telemáticos, por ejemplo, como explicó en su momento el equipo de Gobierno
El CIFSE aprobó el 31 de marzo la incorporación de Hellín Moro como profesor externo. En aquel momento, en palabras del delegado, Enrique Núñez, "se desconocía su anterior identidad y su pasado", recordando que es inconstitucional preguntar por la ideología de nadie. Tras conocerse el pasado de Hellín Moro el Ayuntamiento decidió que no volvería a ser contratado.
