Califica de "ridícula, raquítica e insuficiente" la inversión en servicios sociales, "cada día más alejados de los ciudadanos"
MADRID, 4 Jul. (EUROPA PRESS) -
El PSOE calificó hoy de "cero rotundo" la gestión del Gobierno de Ruiz-Gallardón en materia de servicios sociales y aseguró que, en contra de lo que dice la concejala de esta área, Ana Botella, la 'm' de Madrid no significa mayores, menores, mujeres, migración o minorías, sino que se trata de la 'm' de M-30, "principal prioridad del Ayuntamiento durante la presente legislatura".
En rueda de prensa, la portavoz socialista, Trinidad Jiménez, y el edil Pedro Zerolo, hicieron un balance del departamento que dirige Botella y criticaron que el Consistorio sólo destine este año a servicios sociales 389,3 millones de euros, lo que supone un 6,27 por ciento de los presupuestos municipales consolidados, lo que, a juicio de ambos, es una cifra "ridícula, raquítica e insuficiente".
En este sentido, Jiménez y Zerolo explicaron que el Ejecutivo local destina 1,67 euros de cada 100 a todas las personas mayores, 36 céntimos en Infancia y Familia, 26 céntimos en inmigración y voluntariado, 24 céntimos en programas de igualdad de género y 9 céntimo en Juventud, "mientras que en 2006 la Administración municipal gastará 28 millones de euros en publicidad y propaganda".
Por ello, coincidieron en afirmar que "nunca antes los madrileños habían sentido tan lejos las políticas sociales" y advirtieron que la red de servicios a los ciudadanos "no ha quebrado, no ha entrado en barrena y no se ha derrumbado" gracias a los trabajadores, que, a pesar de tener que atender más del doble de los expedientes recomendados (500 frente a los 250), "muestran una absoluta dedicación y profesionalidad".
FALTA DE COMPROMISOS
En relación con la atención a las personas mayores, los socialistas consideran que el compromiso de Ruiz-Gallardón de crear 42 centros de día "se ha esfumado" y criticaron que el aumento de plazas se realice contratándolas a instalaciones privadas. Además, subrayaron que "no existe un mapa sociosanitario de las personas mayores, por lo que resulta "muy difícil" establecer programas de atención.
También destacaron que "no sólo no se han creado centros de mayores en todos los barrios, sino que algunos de los existentes carecen de unos mínimos de habitabilidad, seguridad y calidad, así como que los servicios para este colectivo son, en su mayor parte, de copago y son muchas las personas que no puedan acceder a ellos.
Otras críticas se centraron en la ayuda a domicilio, cuyo objetivo era llegar a las 20 horas por usuario. "Pues bien, no han superado las 13", precisó Jiménez, quien culpó al Gobierno de Ruiz-Gallardón, y concretamente a la concejala Ana Botella, de haber ejecutado solo el 80,4 por ciento del presupuesto en teleasistencia y de haber ofrecido 153.162 comidas a domicilio cuando estaba previsto llegar a las 180.000.
Finalmente, la portavoz del PSOE tachó de "bonsáis" programas como la lavandería domiciliaria, las camas articuladas, las adaptaciones geriátricas, las comidas a domicilio, cuidar al cuidador, fisioterapia preventiva y de mantenimiento. Asimismo, calificó de "derroche" iniciativas como los programas de salud bucodental, de detección de mayores frágiles con alto riesgo de exclusión social, y de mayores fallecidos en aislamiento social.
DÉFICIT DE TRABAJADORES SOCIALES
Por su parte, Zerolo puso algunos ejemplos de la "mala gestión" de Botella en su Concejalía, y se refirió explícitamente al "déficit" de trabajadores sociales por el exceso de demanda. "En Madrid hay 309 empleados cuando según las recomendaciones de todos los organismos competentes tendría que haber 1.100, es decir, uno por cada 3.000 habitantes", precisó.
Durante su intervención, también quiso aprovechar para subrayar el Plan Madrid de Convivencia Social e Intercultural, el cual, en sus palabras, "es virtual, unilateral, descoordinado, sin soporte económico, asistencialista y vacío de contenido". Por último, manifestó que es "muy difícil" realizar un plan municipal de inclusión social que se coordine con el Plan Nacional sino existe previamente un censo real de las personas sin hogar ni un diagnóstico sobre los mismos.
