MADRID, 25 Feb. (EUROPA PRESS) -
El portavoz socialista de Seguridad en el Ayuntamiento de Madrid, Óscar Iglesias, criticó hoy en el Pleno ordinario el trabajo "a destajo" al que cree que se ven obligados los policías municipales con el incremento de sus horas extraordinarias ya que esto tiene consecuencias directas en la seguridad de los ciudadanos.
Todo ello a raíz de la premisa defendida por el delegado de Seguridad y Movilidad, Pedro Calvo, la de que "quien trabaje más cobre más" con el telón de fondo de la distribución de los fondos de complemento salarial, el caballo de batalla que ahora enfrenta al Gobierno municipal con los representantes sindicales de policías, bomberos y agentes de movilidad.
En este sentido, el también presidente del Grupo Municipal Socialista reclamó al Gobierno municipal que investigue el "descontrol" en la realización de horas extras en el cuerpo de policía. Apuntó en este sentido que en los tres últimos meses del año 2009 se llevaron a cabo hasta 16.902 horas extras en la unidad de Centro. Llegó a poner el ejemplo de las 16 horas extras seguidas hechas por un sargento en un único día, con sólo unas pocas de descanso entre medias. Sin embargo, Calvo aseveró que el número de horas extras en Centro se ha reducido en los últimos años un 21 por ciento.
Lo que reclamó Iglesias es una investigación, sobre todo en la unidad de Centro, hasta hace pocas semanas dirigida por el subinspector Lorenzo Antolínez, dejar de lado a la "policía política del alcalde" basada en el "clientelismo" a la hora de designar los puestos "a dedo" y la creación de más plazas, cumpliendo el compromiso electoral de Alberto Ruiz-Gallardón, que pasaba por 1.500 nuevos agentes para las calles de la capital.
Con un recordatorio del 'caso Faisán', después de que Iglesias hablara de la "policía política" del alcalde, el delegado de Seguridad y Movilidad, Pedro Calvo, inició su intervención criticando que las demandas de investigación parecían más propias de un mitin que de un debate plenario para recordar, a renglón seguido, que el número de horas extras y la denuncia de las cobradas pero no realizadas ya fueron objeto de Asuntos Internos años atrás. La conclusión fue "que no se pudo demostrar que no se hicieron las horas extras y por eso no se pudo sancionar".
FISCALIZACIÓN DE LAS HORAS EXTRAS
El edil recordó que fue en julio de 2005 cuando se modificó la instrucción dentro de la policía relativa a las horas extras para aumentar la fiscalidad del trabajo, un punto que fue rebatido por el portavoz de IU de Seguridad, Ángel Lara, que mostró una hoja de este tipo de instrucción en el que aparece sólo la firma del solicitante, cuando también deberían incluirse las rúbricas del jefe de turno y del oficial al mando. Dijo que son "cientos" las hojas que presentan estas deficiencias, por lo que cree que Calvo "ya tiene algo que investigar".
Lara también se refirió al regalo recibido por el policía Antolínez --un vino Vega Sicilia procedente de un hostelero del distrito Centro-- recordando una circular del Ayuntamiento en la que se señala que el Cuerpo de Policía no debe aceptar regalos y que cuando lleguen se procederá a su devolución. Para ello hay que remitir los datos del donante y los motivos por los que ha tenido esa deferencia. Sin embargo, como aseguró el edil, "los regalos a Antolínez no han sido devueltos".
Con respecto al policía Antolínez, el concejal del PP insistió en que la oposición tiene un "ánimo personal" contra el agente, incluso una "fijación (contra él) y manía persecutoria". Ya en la última comisión de Seguridad, el delegado explicó que el agente fue ascendido por su "formación, los resultados operativos obtenidos y por su implicación profesional y personal".
Antolínez ha sido ascendido a responsable de la Subinspección Central de Seguridad. De él dependen las dos unidades centrales de seguridad, esto es, la que se encarga del Escuadrón de Caballería y la Unidad Canina los perros, y la que gestiona los escoltas de los concejales.
En el año 2006 la Cadena Ser difundió una grabación en la que se podía escuchar al oficial recomendar a los agentes a su cargo que si encontraban sustancias estupefacientes en los locales y, siempre que no fueran grandes cantidades, lo pasaran por alto ya que de incluir este dato en las actas el expediente de sanción podría demorarse. También les sugirió que aumentasen el número de personas que había dentro del local para acelerar la clausura.