Tribunales.- La fiscal mantiene la pena de prisión de 26 y 28 años para los autores de la muerte del joyero de Móstoles

Reclama una condena de dos y tres años de cárcel para el resto de los acusados por encubrir el atraco y beneficiarse de las joyas

Europa Press Madrid
Actualizado: jueves, 18 octubre 2007 19:25
MADRID, 18 Oct. (EUROPA PRESS) -

La Fiscalía de Madrid mantuvo hoy su solicitud de prisión de 26 y 28 años para Roberto Castro y Juan Manuel Jiménez, respectivamente, como autores de la muerte del joyero Antonio Sancho, a quien el primero disparó con una escopeta a bocajarro, en presencia de su hijo, para robar en el establecimiento de la calle de Felipe II, en Móstoles.

En la última sesión del juicio, la fiscal elevó a definitiva su petición de penas para los cinco acusados que se sientan en el banquillo, al estimar que existen "pruebas suficientes" que demuestran que participaron de algún modo en los hechos juzgados.

En concreto, solicitó para Castro, de nacionalidad peruana, 26 años y medio de prisión por los delitos de asesinato, robo con violencia y tenencia ilícita de armas, mientras que para Jiménez, de origen dominicano, 28 años y medio por la misma acusación, a la que se le incluye otro delito por tenencia de armas.

También se acusa a Margarita Flores, Catalina Villafaña y Rosario Ruiz. Para las dos primeras, la fiscal pidió tres años de prisión por encubrir supuestamente el atraco, mientras que para la tercera reclamó dos años de cárcel por aprovecharse de los objetos robados.

En su informe, la representante del Ministerio Público enumeró los indicios de los que dispone para sustentar su acusación contra Castro, considerado el cabecilla de la banda. Entre ellas, figura la declaración policial y judicial de Jiménez, en la que aseguró que 'Freddy', como se conoce al líder, le había confesado que había disparado al joyero.

En el juicio, Castro sostuvo que "nunca" había participado en "ese atraco" y negó que en algún momento le hubiese dicho a su compañero que fuera el autor material de los disparos que acabaron con la vida de Antonio.

Otra de las pruebas de la fiscal se refiere a que parte de las joyas del atraco se encontraron en una bolsa que llevaba Castro en el momento que fue detenido en Barcelona, tal y como reconoció el hijo del joyero.

ATRACO A LA JOYERÍA

Los hechos se remontan al 9 de junio de 2005, cuando Roberto, Juan Manuel, José Luis y otro individuo atracaron la joyería "Felipe II" y retuvieron a su propietario, Antonio Sancho, a su hijo, Marcos Sancho, a una empleada, María Asunción Raposo, y a una clienta, Santiaga Mora.

Los atracadores encañonaron a las personas que había en la joyería y les obligaron a dirigirse a la trastienda. Cuando Antonio les advirtió de que estaban siendo grabados, Roberto le disparó a bocajarro con la escopeta, causando así su muerte inmediata.

El líder del grupo y sus cómplices se apoderaron de 762 joyas que se encontraban tanto en los expositores como en el escaparate, valoradas en unos 133.000 euros. Tras el atraco, los procesados huyeron del lugar en un vehículo.

Tras las detenciones, en el domicilio de Catalina se encontró un reloj plateado dentro de un calcetín que había sido sustraído en la joyería. Además, la Policía Nacional halló varias armas en la casa de Margarita.

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