MADRID, 17 Mar. (EUROPA PRESS) -
UGT ha denunciado este jueves la supresión del Servicio de Mediación-Traducción Intercultural para Menores Extranjeros en los Centros Públicos de Protección de Menores de la Comunidad de Madrid por parte del Instituto Madrileño del Menor y la Familia (IMMF), lo que deja a menores, familiares y trabajadores sin derechos ni garantías, según ha informado el secretario general de la Sección Sindical, Alberto Sánchez, un extremo negado por el Gobierno regional.
Según el sindicalista, la gerente del IMMF, Paloma Martín, suprimirá este servicio de Mediación-Traducción Intercultural a partir del próximo día 1 de abril, una medida que a su juicio supone "un grave retroceso en la atención de estos menores y un claro desinterés por la integración de éstos, así como el entorpecimiento en la labor de los profesionales".
Los siete mediadores-traductores realizan tareas para los menores como el apoyo a los mismos en las entrevistas con trabajadores sociales, psicólogos o médicos; interpretación y traducción de documentos; facilitar los trámites para la obtención de pasaportes y permisos de residencia; o comunicación con las familias de los menores, entre otras.
Además, la falta de estos mediadores-traductores implicará que el resto de profesionales que trabajan con estos menores tengan dificultades para desarrollar su labor al no poder contar con la información que facilita el mediador-traductor sobre la situación personal del menor, la comprensión de determinadas actitudes, conceptos culturales y comportamiento de los menores, asesorar al equipo técnico en situaciones difíciles, y ponerse en contacto con distintas instituciones o personas públicas y/o privadas de interés para los profesionales.
EL IMMF LO NIEGA
Sin embargo, según la Consejería de Familia y Asuntos Sociales, este servicio seguirá, como hasta ahora, cubriendo la demanda de menores que necesiten servicio de traducción y reconducirá los esfuerzos en el ámbito de la mediación cultural para centrarlos en la enseñanza del idioma y la integración social.
El IMMF niega que vaya a reducir el servicio de traducción que cubre las necesidades de los menores inmigrantes. En todo caso, "es responsabilidad de la Administración ajustar los servicios públicos a las necesidades existentes en cada momento y, en particular, a la importante disminución de menores extranjeros llegados a España durante 2010", ha explicado.
El Instituto "se ve en la obligación" de corregir al sindicato UGT, ya que "en ningún momento se ha planteado un recorte" de estas características. Por ello, los derechos de los menores inmigrantes "continúan estando plenamente garantizados y podrán efectuar cualquier gestión que requiera la intervención de los traductores", tales como las entrevistas con trabajadores sociales o médicos, la comprensión de documentos o los trámites para la obtención de pasaportes y permisos de residencia.
Por otra parte, fuera del ámbito de la traducción, el IMMF sí ha detectado un cambio en las necesidades de los menores inmigrantes para una integración real. Como consecuencia, ha optado por "reconducir" parte de los esfuerzos que hasta el momento se dedicaban al área de la mediación cultural, que ha ido perdiendo sentido práctico, para reforzar la enseñanza del idioma, la adquisición de hábitos, la formación profesional, la integración social y la educación que vienen recibiendo, ha añadido.
Este enfoque se fundamenta en la creencia -basada en una detección que se produce al estar en contacto directo con los menores inmigrantes- de que las señaladas son las mejores herramientas para lograr una integración real en la sociedad madrileña.
"Es este último, y no otro, el objetivo de las políticas y actuaciones que desarrolla el Instituto Madrileño de Menor y la Familia", ha concluido el comunicado de la Consejería.